Por fin y de una vez por todas, los concursantes van a tener motivos para sospechar que están protagonizando una de las ediciones más aburridas de la historia de Gran Hermano. ¿Cómo? Al ver la persona que la dirección ha elegido para entrar en la casa como 'coach'. Nada menos que Aída Nízar, una mujer polémica, follonera, manipuladora. "La televisión me necesita, lograré que toda España grite”, ha escrito en su cuenta de Instagram calentando el ambiente de cara a su entrada.
Así las cosas, la gala de esta noche se presenta movidita. Parece que, al última hora, Alonso Caparrós se ha arrepentido de su decisión de abandonar la casa. ¿Será que la dirección le interesa que se quede para enfrentarse a ese toro de Mihura llamado Aída? Puede ser: Terelu Campos ya ha pedido que se quede precisamente para eso, insinuando que se conocen de fuera de la casa. ¿Qué relación habrá entre ellos? Lo cierto es que si Caparrós ya parece un poco perdido y desorientado, Aída puede volverle totalmente loco.
Se ponen las cosas difíciles para Emma Ozores, quien no puede añadir a la casa más que su buen rollo y su presencia silenciosa. Con el programa sin llegar a las cotas de audiencia que acostumbra y los jefes pensando en todo tipo de estrategias para inyectar un poco de energía a los habitantes de la casa, parece lógico pensar que ella será la expulsada. ¿O será Tutto, el supuesto cantante famoso? Veremos qué dice la audiencia.
20 de enero-18 de febrero
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¿Qué me deparan los astros?