Elvira Lindo: "De momento, han ganado más dinero los hombres"

Corazón Elvira, ¿se puede considerar a su perra Lola la Lola de España'? Elvira Lindo No. Se llama Lolita. Es de un tamaño pequeño y preferí el diminutivo, aunque Lola también me gusta mucho..

C. Es una 'yorkshire terrier'. E.L. Sí. La tengo casi por nostalgia. La compré antes de que se me muriera el anterior que también era un 'yorkshire'.

C. ¿Quiso tener perros desde pequeña? E.L. Me han gustado los animales desde pequeña, pero nos trasladábamos mucho de casa. Éramos cuatro hermanos y no pudimos tenerlos. Me empeñé en tener un animal cuando empecé a vivir con Antonio, aunque a él le atraían menos que a mí. Yo, si pudiera, tendría más. También me gustaría tener un gato, aunque tienen un carácter más independiente.

C. Se habla de lo mucho que aportan los animales a sus dueños, pero ¿qué les aportan ustedes a ellos? E.L. A los perros mucho, porque son animales que tienen su manada, se reconocen en una familia, les gusta estar en compañía y con el ser humano.

C. ¿A Lolita le gusta la gente? E.L. Mucho. Cuando vienen amigos a casa, todo el mundo la quiere acariciar. A ella le encantan las visitas, pero no le gustan nada los otros perros. Tampoco le gusta salir a la calle. En eso, parece más una gata que una perra. Lolita es muy cariñosa, pero también es independiente. Ella elige los lugares de la casa en los que quiere vivir. Por ejemplo, nunca ha querido dormir en la cama, prefiere hacerlo sola. Y tiene pasión por sus juguetes. Antes tuvimos dos perros y no les pasaba eso.

C. Se nota que está encantada con ella. E.L. Es curioso, pero a Lolita le gusta mucho la música, sobre todo los vinilos, que se escuchan con más precisión. Antonio le pone todas las tardes música. Le vuelve loca y, cuando se acaban, se pone a ladrar y espera a que Antonio coja el mando y le ponga más. Su afición es increíble, va moviendo las orejas según suenan los bajos. Cuando cambia la música se queda de pie o se sienta: está pendiente.

C. ¿Tiene alguna preferencia musical? E.L. Le gusta mucho Ravel, tiene preferencia por la música clásica vanguardista. Sus gustos son muy precisos y le encanta que se noten los instrumentos.

C. ¿A través de la cultura se puede hacer algo en defensa de los animales? E.L. Creo que sí. Ahora hay una conciencia mayor en España. Es una relación muy pura la que se mantiene con un animal. Pero hay que pensar en los que no son domésticos y que merecen el mismo respeto.

C. Aún resuenan los ecos del 8M. ¿Cree que hay un antes y un después de esta manifestación? E.L. Ha sido un éxito y espero que haya medidas concretas, porque son necesarias. Igualdad en todos los sentidos: sueldos y consideración, que es una cosa más difícil de concretar. El 8M han tenido lugar manifestaciones muy transversales, con mujeres mayores que no han vivido la igualdad. Además de que su trabajo no ha sido considerado. Han sentido con emoción que lo que han hecho en la vida se tiene en cuenta. Conciliación y dependencia son asuntos muy importantes.

C. ¿En alguna ocasión se ha sentido discriminada? E.L. Cuando empecé a trabajar, con 19 años, yo era una chica muy moderna. Sin embargo, había que soportar, no solo de gente mayor sino de los propios colegas en edad, cosas que ahora se empiezan a ver como inaceptables, comentarios… En profesiones como la nuestra, nunca sabes lo que gana el compañero, pero estoy segura de que, al menos hasta este momento, han ganado más ellos. Han sido empresas perfectamente modernas, pero se ha tendido a pagarles más a ellos.

C. 'Bolinga' es un cuento para niños que escribió y que habla sobre un gorila, y en otro de sus libros aparece Lolita. ¿Tiene pensado volver a escribir sobre el mundo animal? E.L. No lo descarto. Me encantan los animales, la naturaleza, observar la expresividad, las costumbres, las manías, los comportamientos, la relación con los humanos... Son muchas las mujeres que han escrito sobre el comportamiento de los animales.

C. Estas inquietudes las comparte con su marido, Antonio Muñoz Molina. E.L. Es curioso. A mi marido le gustan muchísimo las plantas y las flores, y a mí la fauna.