1. Empujando el carrito:
Con la espalda recta y los hombros bajos, empuja tu carrito de la compra ejerciendo una ligera presión con las palmas de las manos para controlarlo, pero sin aferrarte a él. Esta combinación consigue activar los abdominales.
2. Mientras caminas:
Cada 10 pasos, inspira y contrae el perineo (el músculo que usas cuando quieres evitar orinar) al máximo. Al espirar, relaja la zona. Tonificar este músculo ayuda a aplanar el vientre. Haz este ejercicio durante cinco minutos.
3. De pie en el autobús:
Durante cinco minutos, colócate con los pies separados el ancho de tus caderas y trabaja los abdominales siguiendo los movimientos del autobús sin estar agarrada a la barra, como si estuvieras surfeando (pero permanece cerca de la barra, por si los frenazos). Inicialmente, este ejercicio requiere un poco de habilidad, pero si se repite a diario, es una buena manera de esculpir el vientre mientras se trabaja el equilibrio.
4. Mientras ves una serie:
Sentada en tu sofá, con los abdominales apretados, eleva los pies del suelo, e inclínate sobre la nalga derecha. Tras cinco segundos sin apoyar los pies en el suelo, bascula hacia la nalga izquierda. Repite 10 veces.
5. Sentada en la oficina:
Siéntate con las manos sobre las rodillas. Al espirar, dirige tu columna a la izquierda, luego hacia atrás y después a la derecha, hasta dibujar un círculo con los hombros con tu ombligo como eje, 10 veces.
6. Cantando en la ducha:
Coge aire inflando el vientre y llevando el ombligo hacia delante. Luego, mientras cantas, intenta meter el ombligo gradualmente mientras va saliendo el aire. Con este ejercicio fortalecemos los músculos transverso y oblongo, ideal para afinar el tamaño de la cintura. Hazlo durante cinco minutos cada día.
-¿Qué deporte es mejor para perder peso?