Recetas de Semana Santa: dónde comer un buen potaje de vigilia

La Semana Santa, más allá del caracter religioso, las creencias y la fe de cada uno, es una de las épocas del año más ricas en nuestro país en cuanto a tradiciones y cultura se refiere. Desde las sobrecogedoras procesiones que se celebran en diferentes puntos de España, a la imaginería y pintura a la que han dado lugar y, por supuesto, la gastronomía típica de estas fechas ( y por supuesto, también en su versión más ligth).

Movida por las antiguas normas religiosas, y avivada por la escasez de alimentos de otras épocas, las recetas tradicionales de Semana Santa se caracterizan tanto por la contundencia de sus platos, como por la ausencia de carne en todos ellos. El bacalao, las torrijas y, sobre todo, el potaje de vigilia son los platos más típicos de estas fechas, así que hemos decidido retrasar la 'operación bikini' por esta deliciosa causa.

El potaje de vigilia es un guiso que admite tantas variantes como el cocido del que hablábamos hace unos días, así que debe haber más o menos tantas recetas como casas en las que se cocina. Sin embargo, si algo tienen todos en común es que llevan espinacas, bacalao, huevo duro y garbanzos.

Si queréis un buen potaje de vigilia tenéis que poner los garbanzos en agua templada con sal la noche anterior, y el bacalao igual, pero en agua fría que se cambia cada ocho horas. En una cazuela (si es de barro, mejor) ponemos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra, una cebolla y los garbanzos, le añadimos caldo de pescado (cuanto mejor sea el fondo, mejor) y lo dejamos cocer alrededor de una hora. Aparte, hacemos un sofrito de verduras y lo rehogamos con pimentón, añadiendo por último la patata y el bacalao. Cuando esté listo, añadimos el sofrito a la cazuela y lo dejamos cocer con los garbanzos a fuego suave. Por último, unos 15-20 minutos antes de retirar, añadimos las espinacas que previamente hemos salteado. Dejamos cocer todo junto, y le damos uno tiempo de reposo antes de servir en un solo vuelco.

Según nos recomienda Abc.es , "Madrid tiene larga tradición y entre las cucharas nunca falta en esta época el potaje, como el de Caray, El Pitaco, El Fogón de Trifón, Los Galayos, o el de Estrella del Bajo Carrión, en Palencia". Y nosotras añadimos a esta lista Casa Elena, en Cabañas de la Sagra, Toledo; el exclusivo Espacio 33 de Torre Espacio, en Madrid; La Sopa Boba, en Guadarrama; El Cielo de Urrechu, en Pozuelo de Alarcón; o Cañadio, en Santander.