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Cómo equilibrar el consumo de grasas para evitar la obesidad infantil

Por más que se empeñen las abuelas en ver a sus nietos hermosos y fuertes, el sobrepeso de los niños no es una cuestión de masa muscular sino de grasa.

Los niños adoran los postres y los dulces. En la imagen, tres muffins. / GTRES

Joaquina Dueñas
Joaquina Dueñas

Grasa consumida y grasa acumulada. Tanto es así que un estudio realizado por Luis A. Moreno Aznar, Margarita Alonso Franch de la facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Zaragoza y de la Universidad de Valladolid, respectivamente lo deja meridianamente claro: Sólo el 1% de la obesidad infantil se debe a los síndromes genéticos o endocrinológicos. El 99% restante es una obesidad nutricional, es decir, se debe a una dieta desequilibrada y rica en grasas combinada con una vida sedentaria.

Las grasas son un nutriente que además de aportar energía el organismo necesita para asimilar vitaminas liposolubles como la vitamina A, la D, la E o la K1. Sin embargo, su consumo excesivo en alimentos de alto valor calórico y bajo nivel nutricional colabora con el incremento exponencial de la obesidad en la población infantil.

Pero, ¿dónde ingieren los niños la mayor cantidad de grasa? Los niños y los adolescentes adoran los postres, las patatas fritas, las galletas, las rosquillas y los pasteles, todos ellos fuente de grasa, a los que hay que sumar la comida rápida, los platos precocinados que contienen fritos o las salsas o aderezos cremosos. Lo cierto es que la grasa aporta sabor y textura, por lo que en los productos que ya se comercializan cocinados no escatiman en grasas para lograr mayor aceptación entre el público.

Así, el cuerpo utiliza la grasa como fuente de energía, sin embargo, la que no se consume se almacena en forma de células adiposas, una fórmula ancestral del organismo para guardar combustible para los tiempos de escasez, heredada de la época en la que las hambrunas eran habituales y en los que existía el acceso a la comida que hay actualmente en el conocido como primer mundo.

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