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Kendal Jenner, la más top de las hermanas Kardashian, ha resultado ser una verdadera caja de sorpresas. Y no solo por esa afición por la fotografía que podría llevarla a ocupar el otro lado de la cámara cuando decida dejar la pasarela. En una de sus últimas entrevistas habló largo y tendido sobre su carrera de modelo y dejó constancia de algunos aspectos sorprendentes. Por ejemplo, que no le importa nada mostrar sus pechos. “ Me encanta que se me vean las tetas. Es mi especialidad, supongo. Soy joven. Cuando sea mayor, quiero poder contemplar mis fotos y decir: 'Qué guapa era”.
En realidad, las modelos están acostumbradas a mostrar prácticamente todo su cuerpo, a pesar de que las redes sociales se empeñen en censurar los pezones cada vez que aparecen fotografiados. Resulta cada vez más incomprensible que estos espacios habitados sobre todo por millenials, cuya relación con la desnudez es mucho más natural, apliquen esta política tan estricta y censora sobre el cuerpo femenino. Kendall es de las que traza una línea entre esta actitud relajada con el top less y el desnudo integral: “Sí, definitivamente hay una línea. No me fotografiaría totalmente desnuda”.
En la entrevista, la Kardashian modelo abundó también sobre la peculiar manera en la que ella y su hermana Kylie fueron educadas. “Tenía sólo 9 años cuando comenzó nuestro reality, 'Keeping Up with the Kardashians', con lo que Kylie y yo estamos acostumbradas a trabajar desde pequeñas. En realidad, creo que fuimos educadas para ser unas adictas al trabajo. Mi hermana y yo somos jefas en pequeñito: cada una en lo nuestros, queremos dominar el mundo”.