“He tenido una relación tóxica con la comida durante toda mi vida”

Definitivamente, el deporte ha cambiado totalmente la vida de Khloé Kardashian, y no sólo porque ahora pueda presumir de figura explosiva tanto como cualquiera de sus hermanas. En unas recientes declaraciones a la revista “Health”, la exitosa emprendedora explicó que en principio se refugió en el ejercicio para superar su divorcio con Lamar Odom, pero pronto se convirtió en su manera de evadirse del estrés de la vida diaria.

“Cuando me divorcié, realmente necesitaba una escapatoria. Me refugié en la comida. Toda mi vida he tenido una relación tóxica con la comida. Pero no funcionaba. Así que me apunté a un gimnasio. Me ponía los cascos y me subía a la elíptica hasta que se me pasaba el estrés o se iban los paparazzis que me esperaban a la puerta. Mientras sudaba veía “Mujeres Desesperadas” o cualquier programa de la tele y se me olvidaban mis preocupaciones. Enseguida empecé a notar que perdía peso, y eso me motivó más que la comida”.

Sin embargo, el cambio que ha conseguido en su cuerpo no es exactamente producto del ejercicio aeróbico en el gimnasio, sino de su entrenador personal, Gunnar Peterson, y de su nutricionista. “Dejé totalmente las bebidas azucaradas con gas y los derivados de la leche y perdí casi 10 kilos. Ahora la dieta ya no me parece una dieta, sino la manera en la que me cuido y me quiero”.

Khloé Kardashian reconoce que las restricciones de comida de la dieta que realiza no tienen nada que ver con la manera en que comen sus hermanas, especialmente Kim. “Kim puede comer absolutamente de todo. La odio. Mi nutricionista me explicó que el cuerpo de Kim es como el de un Ferrari, mientras que el mío es como un Honda: necesita muchos más ajustes”.