La cantante Rihanna con top naranja /
La Universidad de Harvard ha puesto el foco en las actividades menos conocidas de la cantante de Barbados: las que tienen que ver con la obra social y el humanitarismo. Tal es su actividad en estos campos, que el próximo día 28 recibirá el premio a la persona más humanitaria del año que ya recibieron la Premio Nobel Malala Yousafzai o el actor James Earl Jones.
En su comunicado justificando este galardón, Harvard señaló que Rihanna construyó el año pasado un centro de investigación oncológica y medicina nuclear para el diagnóstico y el tratamiento del cáncer de mama en el hospital Queen Elizabeth de Bridgetown, en Barbados. Además, ha fundado el programa de becas de la Clara and Lionel Foundation (sus abuelos), que ayuda a estudiantes brillantes del Caribe a acceder a universidades estadounidenses.
Su actividad benéfica no se queda, sin embargo, en su país. Gracias a su colaboración con el proyecto Global Partnership for Education and Global Citizen, cientos de niños de alrededor de 60 países en desarrollo pueden acceder a una educación. El programa, además, da prioridad a las niñas, que son las más afectadas por la falta de acceso a la escuela y a la consiguiente disminución de sus posibilidades de llevar una futura vida digna junto a sus familias.