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Irina Shayk ha vuelto a Instagram tras su embarazo. La rusa ha compartido con sus seguidores de la red social más visual la primera imagen en bikini después de dar a luz hace dos semanas a su primera hija, fruto de su relación con el actor Bradley Cooper.
Y a juzgar por la instantánea, quién diría que hace unos días estaba embarazada. La rusa ha recuperado su figura en tiempo récord tras un embarazo de lo más polémico porque siempre que aparecía en público estaba empeñada en ocultar su tripita debajo de un abrigo o un jersey amplio o colocando delante del vientre una bolsa o un bolso.
De hecho, ni la top rusa, que se subió a la pasarela embarazada en el desfile de Victoria's Secret, ni Cooper han confirmado ni desmentido que estaban esperando un bebé, tampoco su nacimiento y siempre ha sido su entorno el que ha filtrado las informaciones, como el nombre de su retoño, Lea de Seine, del que ya te hablamos hace unos días.
La imagen, en la que la rusa se asegura de contar que está tomada e el momento, tiene un enfoque estratégico, tanto como su postura. Ella está tumbada boca arriba y con las caderas ligeramente inclinadas hacia la derecha para afinar la cintura, además la fotografía tomada desde arriba, por tanto, las posibilidades de que aparezca un michelín son imposibles. Está todo medido.
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