actualidad
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La tormentosa relación de Rob Kardashian, el único hijo varón de Kris Jenner, con Blac Chyna, madre del hijo del rapero Tyga, primer novio de Kylie Jenner (esto es un verdadero culebrón), terminó como se esperaba: con un escándalo. Él publicó fotos y vídeos de ella en situaciones comprometidas y muy desnudas (en un caso de libro de 'porn revenge') y ella le acusó de malos tratos a él. Una vez más, las Kardashians mayores tuvieron que correr en ayuda de su hermano y sacarlo de una situación explosiva que, además, se dirimía de manera pública a través de las redes sociales. Previsiblemente, la ira de Chyna pasó de dirigirse exclusivamente hacia Rob, a amenazar al resto de la familia. Judicialmente.
A finales de 2017, Blac Chyna decidió demandar a Kim Kardashian y Kris Jenner pues entendía que ellas habían maniobrado para sabotear “Rob & Chyna”, el 'reality show' que ella y Rob protagonizaban y en el que se veían las miserias de una pareja francamente disfuncional. Sin embargo, las todopoderosas lideresas de los 'realities' adujeron que el programa se canceló en el momento en que ella acudió a un juez para conseguir una orden de alejamiento por violencia doméstica contra Rob, orden judicial que hacía imposible que se pudiera filmarles juntos.
Para complicar un poco más la cuestión, lo cierto es que poco después de que el juez garantizara tal orden de alejamiento, las Kardashian llegaron a un acuerdo con Blac Chyna para pagarle 20.000 dólares al mes a cambio de que retirara la acusación de maltrato contra Rob. Ella, claro está, aceptó. Ahora, un juez ha dictaminado que la acusación de sabotaje contra Kim y Kris no tiene ninguna base y a retirado los cargos contra ellas. Solo queda ya una batalla judicial por ganar en este enfrentamiento terrible: Chyna aún acusa a Rob de haber torpedeado el programa que compartían. No parece que vaya a salirse con la suya.