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Dicen que el primer paso para poner remedio a algo que nos atormenta, es reconocerlo. En el caso de todos estos famosos, lo que hicieron fue asumir que tenían problemas de ansiedad y depresión. Incluso, lo reconocieron públicamente para ayudar a otros que estuvieran en su misma situación. Adele, Miley Cyrus o El príncipe Harry son solo algunos ejemplos de ello.
En 2015, Lady Gaga habló abiertamente sobre sus problemas de depresión y ansiedad y cómo consiguió superarlos.
Brad Pitt conoció los demonios de la depresión tras separarse de Angelina Jolie.
Los problemas de ansiedad y depresión de Demi Lovato la llevaron, incluso, a estar ingresada en un centro de rehabilitación hace poco más de un año.
Mel Gibson llegó a reconocer que hizo 'El castor', una película sobre la depresión, porque él cayó en ella durante un tiempo, haciendo muy complicada la convivencia.
Adele sufrió estragos de una depresión postparto.
Emma Estone lucha contra la ansiedad.
Selena Gomez ha sufrido depresión.
Enrique de Gales, más conocido como el príncipe Harry, ha reconocido ser incapaz de hacer frente al duelo de su madre y le llevo a unos años locos que no tenían fin.
Catherine Zeta-Jones fue ingresada para tratar su trastorno bipolar.
Miley Cyrus ha sufrido depresión llegando a necesitar medicación aunque estuviese en contra de ella.
Kristen Stewart ha sufrido ansiedad, especialmente entre los 15 y 20 años.
Ryan Reynolds ha sufrido ansiedad por la presión y exigencias de su padre.
Cara Delevigne ha sufrido depresión y ansiedad hasta el punto de autolesionarse.
J. K. Rowling tiene tendencia a la depresión desde que era jóven.
Jon Hamm ha estado tomando antidepresivos y h asistido a terapia para superar sus problemas.
Lena Dunham ha sufrido depresión, ansiedad y tiene un trastorno obsesivo-compulsivo.