La metamorfosis (de estilo) de Kim Kardashian
Kim Kardashian esla evolución en sí misma. No te pierdas el cambio de su look desde el 2006 hasta ahora. Estilismos, peinados, e incluso sus rasgos. ¿Cómo ha cambiado Kim Kardashian?
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La hemos visto pasar de mujer a icono global en apenas 10 años. Y sin interpretar extraordinariamente ningún papel de Oscar ni vender millones de discos: Kim Kardashian se convirtió ella misma en producción y, mientras nos mostraba cómo buscaba su acomodo en la fama y en la moda, se fue haciendo un hueco en nuestro interés. Contemplar cómo ha ido despojándose de abalorios y estilistas para convertirse en la musa de Yeezy, la firma de su marido, Kanye West, ha sido fascinante. Veamos cómo ha pasado de aspirante a famosa en el photocall, a leyenda del marketing personal , esposa de genio y madre de familia numerosa.
En sus inicios, Kim se pasaba los días de photocall en photocall, sirviendo de gancho para todo tipo de marcas y tratando de llamar la atención y seducir a otras tantas. Su presencia no era aún demasiado solicitada, una joven aspirante a estrella más, con un estilo sin depurar. Así se presentó al estreno de la serie de televisión “Entourage”: versioneando Ibiza.
Al final del año, en la fiesta por el primer año de vida de una marca de vaqueros, Kim se mostró un poco despistada a la hora de sofisticar ligeramente su 'look': la chaqueta a modo de capa corta podría llegar a tener gracia, pero combinada con un top de seda pierde un poco el sentido. Aún no había llegado a su vida ninguna estilista, pero sí el rapero, actor y cómico Nick Cannon, su ligue de entonces.
Por esta época, la actividad romántica de la gran Kardashian estaba “on fire”. Poco después de asistir a esta fiesta de una marca de móviles, comenzó a salir con el jugador de la NFL Reggie Bush. Desafortunadamente, a Kim no le convencía nada el estilo deportivo e insistía en echarse años encima con un maquillaje y unos 'outfits' de señora total. Eso sí: lo que lleva en los pies son unos Louboutin.
Realmente no hay por dónde coger esta combinación de piezas de ropa que, ya por separado, son poco seductoras. El marrón que combina en bolso (¿y esas cadenas?), sandalias y leggins no es nada tranquilizador, y el cinturón no termina de hacer buenas migas con el top. El toque rosa en los labios y las enormes gafas tampoco nos encantan demasiado.
Por estas fechas, el 'reality' de la familia, “Keeping Up With the Kardashians”, comienza a despegar tímidamente. Sin embargo, aún no han entrado los ejércitos de maquilladores y estilistas en la vida de las chicas, que siguen mostrando su estilo tal y como es. Para una fiesta en el Stoli Hotel de Miami, Kim eligió un vestido que recuerda a un camisón y su mejor cara de no haber roto un plato.
Prueba del buen resultado de audiencia del 'reality show' fue la nominación que Kim recibió este año en los “Teen Choice Awards”. Para la ceremonia, se decidió por este cándido vestido de seda que no le dio demasiada suerte: perdió el premio a la protagonista de “reality show” del año a manos de Lauren Conrad.
Continúa el despegue del programa de televisión y por fin entran las estilistas en juego. En esta etapa de tanteo, uno de los 'looks' más ensayados fue el de latina sexy. La verdad: un salto cualitativo enorme. Y el maquillaje también le ayuda a quitarse un poco el aspecto aniñado.
Comienzan a llover los contratos de publicidad y el Museo de Madame Tussaud anuncia que incluirá a Kim Kardashian en su repertorio de famosos de cera. El maquillaje profesional y las extensiones hacen milagros. Las estilistas logran que Kim convierta 2010 en el año en que abandonó el estilo playero y comenzó a vestirse de colores naturales. Este vestido aún es un diez.
Las Kardashian asistieron a una fiesta organizada por Donna Karan, la revista “InStyle” y Kelly Ripa. La estrategia estaba clara: que Kim brillara sobre todas las cosas. Los volúmenes son graciosos y los Louboutin están a años luz de los que llevaba en sus comienzos.
Justo aquí comienza a girar la rueda del destino para Kim, invitada habitual de lo clubs de Las Vegas (los famosos “bolos”), sobre todo en fechas especiales como Nochevieja. Aquí la vemos con su estilismo de fin de año, luciendo su nuevo pecho (por estas fechas comienza a modificar en serio su cuerpo) y vestido brillante, perfecto para la ocasión. Pero lo más importante habiaocurrido algunos días antes: participó en la grabación de un videoclip en cuya lista de invitados tambIén estaba... Kanye West.
El 'reality show'' ya ha despegado definitivamente y los proyectos se acumulan. Las Kardashian han abierto tiendas nuevas, publicado autobiografia y lanzado perfumes. Aquí vemos a Kim en el lanzamiento de la primera colección de la familia, The Kardashian Kollection, para los almacenes Sears. Kim llevó una de las piezas diseñadas por el clan: un mono animal print.
Kim lanza su quinto perfume y la familia renueva por dos temporadas más su 'reality show' por una cantidad récord: 50 millones de dólares. Para esta aparición en una proyección de cine en beneficio de los damnificados por el terremoto de Haití, Kim utilizó su artillería pesada: el viejo 'glamour' de Hollywood para impulsar la recaudación. Poco antes de este evento se había separado del jugador de la NBA Kris Humphries, con el que estuvo casada solo72 días. Otro récord.
Esta fiesta era importante: la gala amfAR's Cinema Against AIDS que se celebra durante el Festival de Cannes. Se trata de una cena que sirve para recaudar dinero para la lucha contra el sida y a ella acuden las estrellas del cine más importantes y los productores más exitosos. Kim no desmereció con este Elie Saab amarillo que, después de la cena, fue visto a bordo del yate de P. Diddy y en compañía de Kanye West.
Kim y Kanye deslumbraron a los 'fashionistas' más incrédulos en su primera visita a la Semana de la Moda de París juntos. Asistieron, claro, al desfile de Givenchy, su marca favorita. Kim estaba embarazada de North, de ahí los esmóquines a juego (el de ella es, claro está, de Givenchy). A partir de aquí, Kanye se hace dueño del armario de su novia y le da un vuelco. Es él quien dirige los hilos de las estilistas, quienes reciben órdenes del rapero de no ponerle a su chica nada que no venga de París.
De nuevo Givenchy le sirve a Kim el 'look' perfecto para no pasar inadvertida en la anual Gala del Instituto de la Moda del Metropolitan Museum of Art's de Nueva York (la famosa Gala del Met). El tema de la edición era el movimiento punk y su influencia en la moda. Embarazada de ocho meses, Kim se salgó el 'dress code' a la torera: bastante punk era ya acudir a punto de dar a luz.
Una nueva temporada en París, vuelve a merecer la visita de Kim y Kanye , convertidos ya en fijos en los desfiles de Givenchy, su marca de cabecera. Solo habían pasado tres meses desde el parto de North, pero Kim no quiso perderse ninguna ocasión de lucir curvas. Además, ya estaba en camino a su primera gran mutación capilar: el rubio.
Efectivamente: el monocolor se convierte en una obsesión. En esta ocasión Kim elige el blanco para atender a la gala del 20 aniversario de la USC Shoah Foundation's. Este mismo mes, viaja a Florencia para casarse con West con un vestido que ya figura entre los más elegantes de la historia, firmado por Givenchy.
En el tradicional viaje de Kim y Kanye a la Semana de la Moda de París, la parejita decide apoyar a otro de sus diseñadores mimados: el jovencísimo director creativo de Balmain, Olivier Rousteing. Kim lleva una chaqueta bordada diseñada por él. Por estas fechas se publica la famosa portada de la revista “Paper”con la que consiguió lo que anunciaba en portada: “Romper Internet”. Aparecía desnuda y de espaldas, luciendo su ya característico trasero.
Esta Kim dorada, la que actualiza el clásico 'glamour' de Hollywood con el sexy subido, es probablemente la que más cerca esté de la Kim real. El vestido es de Jean Paul Gaultier y lo llevó a la quincuagésimo séptima gala de los premios Grammy. Según confesó la propia Kim, era pesadísimo, pero le sentaba como un guante.
Por primera vez y siguiendo los dictados de su gurú estético, Kanye West, Kim se decide por el platino. Estrenó este color de impacto durante otra de sus visitas a la Semana de la Moda de París, donde lució como nunca estilismos de impacto. Aquí la vemos vestida de Balmain de pies a cabeza.
Como siempre que está embarazada, Kim no pospone ningún evento ni cita. Aquí la vemos embarazada de Saint West, con un vestido de Balmain y en los MTV Video Music Awards.
Vemos aquí la mano que mece la cuna del estilo de Kim: este estilismo es Kanye cien por cien. El top bandana es hoy un clásico en el armario de la gran Kardashian, y los pantalones, una versión del clásico vaquero deconstruido, la típica pieza interesante que le gusta al rapero. Sobre todo, un abrigo estampado con un print animal. Estilazo.
La reina de los vestidos desvestidos, la maravillosa Cher, inspiró este momento de Kim en la Semana de la Moda de París. El diseño es, cómo no, de Balmain. Durante este viaje a París, Kim sufrió el asalto y el robo que le arrebató, entre otras piezas de joyería, su maravilloso anillo de compromiso, con un enorme diamante valorado en 4 millones de dólares.
Kim asistió a la inauguración de una tienda de Balmain en Los Ángeles con un estilismo inesperado: un top muy cercano a un sujetador de estilo deportivo y una preciosa falda con detalles plateados y transparente. Este mes supimos que Kim y Kanye habían recurrido a una madre subrogada para ampliar la familia.
En los momentos en los que la etiqueta no manda, podemos ver la gran influencia que Kanye West y el espíritu deportivo de Yeezy tienen sobre su estilo. Por fin, lo deportivo entra en sus quinielas. Aquí la vemos con unos shorts en camuflaje absolutamente informales que combina con un body prácticamente transparente y sandalias de fiesta. Max Mix total.
Lo impensable: Kim llevó blazer y pantalones oversize para cumplir con su papel de panelista en “The Create and Cultivate”, una conferencia sobre creatividad. Más de 1.500 personas acudieron a escucharla decir: “Dad el paso. Haced el trabajo. No seáis vagos. No hay atajos”.