actualidad
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En Corea del Norte es tabú hablar de sus dirigentes, sobre todo, de la dinastía familiar instalada en el poder desde hace 80 años. A ojos de sus ciudadanos, no tienen vida privada, porque están tocados por el dedo de Dios. Por eso, verlos en un país extranjero departiendo amigablemente en un evento de repercusión mundial, como los Juegos Olímpicos de Invierno de Corea del Sur, es casi como una aparición sobrenatural. Kim Yo-jong, la hermana menor del dictador Kim Jong-un, protagonizó algo parecido, en febrero, cuando se la vio sonreír en las gradas del estadio olímpico y animar a la delegación que encabezaba.
Poco se sabe de esta joven menuda, vestida con sobrias chaquetas de cuello Mao y faldas a la rodilla y sin una gota de maquillaje, a la que escrutaron las cámaras occidentales. No se conoce su edad -en torno a los 30 años-, tampoco si está casada o tiene hijos, pero sí que le gustaba la política desde la adolescencia y que su progenitor, el dictador Kim Jong-il, padre del actual, la llamaba "mi princesa". Ella es la responsable de cuidar y pulir la imagen de su hermano, Kim Jong-un, algo que en Corea del Norte solo tiene un nombre: propaganda. En octubre, él la nombro miembro del Politburó del Partido de los Trabajadores, la espina dorsal del régimen, un cargo que solo ha ostentado una mujer antes que ella: su tía paterna, Kim Kyong-hui, en su tiempo brazo derecho del dictador, y ya muy anciana.
Kim Yo-jong acompaña a su hermano en actos del partido y en viajes e inauguraciones. En las fotos, aparecen a menudo con sus brazos entrelazados. Es el rostro amable, empático e inteligente de un régimen despiadado y hermético como un agujero negro, donde la fidelidad es una virtud teologal. Ella, se dice, es el líder en la sombra, en un país que prohíbe gobernar a las mujeres.
Pero, como en la Roma Imperial, la dinastía de Corea del Norte se rige por principios que solo obedecen a las obsesiones del líder. Decenas de miembros de su familia ocupan puestos en la madeja del poder, pero pueden ser ejecutados en cualquier momento, como su hermanastro Kim Jong-namy, envenenado en un aeropuerto, o su tío político Jang Song-thaek, que pasó de ser el muñidor en la sombra al patíbulo. ¿Resistirá Kim Yo-jong las intrigas de palacio? ¿O acabará como Drusilla, la hermana de Calígula, o Lucila, la del emperador Comodo, degradadas con el silbido de una espada?
"Es ingeniosa y con buenas habilidades de liderazgo". Kim Jong Il, su padre, 2001.
Nació en Pionyang, de la relación del dictador norcoreano Kim Jong-il con una bailarina.
Estudió en Berna (Suiza), como sus hermanos mayores, en los años 90, y luego Informática en la Universidad Kim Il Sung de Pyongyang.
Habla inglés, alemán y francés. Aprendió ballet y monta a caballo.
Se le vio, por primera vez, en una sesión de fotos del Partido de los Trabajadores, junto a su padre, Kim Jong-il y, más tarde, en el funeral de este.
Encabezó la delegación de Corea del Norte en los recientes Juegos Olímpicos de Invierno de Corea del Sur.