actualidad
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Si hay una cosa que dé la edad, es experiencia. Y Jane Fonda, a sus 82 años, va sobrada. Ojo, que es una mujer que no tiene miedo a experimentar con las nuevas tecnologías. Incluso, si puede servirse de ellas para rescatar momentos de ese pasado sobre el que edificó su fama y su éxito o si le sirven para lanzar un mensaje a las nuevas generaciones, para invitarles al ejercicio de la responsabilidad. Todo esto se conjuga en su última acción.
Vayamos por partes. La buena de Jane se ha dado cuenta, como todos nosotros, que en tiempos de reclusión obligada, no son pocos los que han decidido hacer todo ese ejercicio atrasado que tenían. Las redes sociales se han llenado de 'personal trainers', gurús del 'fitness' y demás profesionales del sector, para indicarnos cómo debemos realizar las actividades sin acabar en el hospital lesionados, que no es un lugar agradable para visitar nunca, pero mucho menos en estos tiempos... Entre ellos, ha emergido la figura de Fonda.
Sí, la actriz ha colocado su esterilla en el suelo y se ha servido de otro de los inventos que hemos rescatado del olvido de las 'apps', Tik Tok ( los famosos se han vuelto completamente locos haciendo vídeos con ella), y ha hecho un montaje con imágenes de aquellas clases de aerobic que ella ofrecía al mundo cuando era una práctica innovadora. ¿Lo mejor de todo? A Fonda le importa entre nada y nada de nada que su audiencia se mueva. Lo que pretende es captar la atención de todos aquellos que, como ella dice, están viviendo este "secuestro en casa".
¿Y una vez nos tienen enganchados? Lanza uno de esos mensajes activistas que, en los últimos meses, han provocado que acabara detenida por encabezar manifestaciones delante de diferentes edificios gubernamentales de Estados Unidos. Genio y figura. Jamás lo habíamos dudado. La actriz tiene el propósito de que, todos los 'millennial' que viven pegados al móvil y pasan por su Tik Tok, se conciencien de la importancia que tiene cuidar el medio ambiente. Que sí, que uno tiene que ocuparse de tener a raya el peso y que el cuerpo esté tonificado en su justa medida, pero también hay que mirar alrededor y ser respetuosos con la naturaleza.
"¿Saben qué? Ya hay demasiados vídeos de rutinas de gimnasia en internet y en la televisión. Lo que realmente quiero que hagan es trabajar conmigo por el planeta", se escucha que cuenta, sin dejar de mover una de sus piernas al aire. Es incombustible. Porque Fonda pone de manifiesto que, los achaques de espalda de su personaje en 'Grace&Frankie', son solo exigencias del guion.
Pide que luchemos juntos, además de por esta pandemia, "contra el cambio clmático". Y se dirige a quien la esté escuchando al otro lado de la pantalla: " Estamos viviendo una crisis climática que es una emergencia real, así que aunque estés en el sillón o en tu alfombrita de yoga, ¿te unirás a mí? El futuro te necesita y yo también". Solo por la puesta en escena, se merece que todos y cada uno de nosotros nos esforcemos. Como ella lo ha hecho para llamar nuestra atención. Misión cumplida, Jane.