El bombazo de la "dimisión" de la Familia Real británica del príncipe Harry y Meghan Markle iba a ser el acontecimiento más crítico para la monarquía del Reino Unido en lo que va de siglo XXI,. De hecho, se hablaba ya de otro "annus horribilis", también gracias a la implicación del príncipe Andrés en el escándalo sexual del millonario estadounidense Jeffrey Epstein. Pero no. La crisis del coronavirus ha borrado todos esos problemas y la reina Isabell II ha tenido que ocuparse de asuntos más trascendentales, que atañen a la salud misma de la ciudadanía. Sin embargo, la rivalidad entre los Duques de Cambridge, del príncipe Guillermo y Kate Midlleton , y los de Sussex continúa sin prisa pero sin pausa, con revelaciones casi diarias que desvelan que vamos a asistir a una lucha sin cuartel por ganarse el favor del público que más interesa ahora mismo a las figuras públicas e institucionales: el de las redes.
Justo ahora que Meghan Markle y el príncipe Harry han aterrizado en Los Ángeles, donde van a situar su residencia y base de operaciones empresarial, sabemos que el príncipe Guillermo y Kate Middleton han contratado a David Watkins, el experto en redes que ayudó a los Sussex a convertir su marca y perfil, @SussexRoyal, en la más seguida de toda la realeza británica. Ya se puede observar en @kensingtonroyal, la cuenta de los Cambridge, el esfuerzo que Watkins está haciendo por convertir la imagen controlada y algo hierática de la pareja heredera en una presencia adorable para los followers. De hecho, han comenzado a aparecer tiernas fotos de la pareja con sus niños que nada tienen que ver con las habituales fotos oficiales. Resultado: en pocos días han logrado igualar en seguidores a sus competidores al otro lado del Atlántico.
Este fichaje estelar de los Cambridge es más trascendente de lo que puede parecer. Anuncia que los herederos al trono británico saben que no pueden dormirse el los laureles de la visibilidad que les concede su posición de estado: tienen que trabajar para conserguir el favor de la ciudadanía en Instagram. Hasta ahora, bastaba con su atractivo de joven pareja cien por cien británica incluso en su personalidad, un poco anodina. Hoy se ven forzados a entregarse más al ojo público para competir en un terreno en el que la emoción lo es todo. Lo tienen difícil, pues entran en el territorio natural de Meghan Markle, libre para usar sus armas de 'celebrity', su feminismo y su fuerte conciencia social. El príncipe Harry también aporta un plus de simpatí y seducción royal, como heredero del carisma y la humanidad de su madre, Diana Spencer. De hecho, la CNN ya ha anunciado que "Meghan Markle y el príncipe Harry son la realeza de Instagram". Su reino son las redes.
Por su parte, los Duques de Sussex están realizando movimientos igualmente cautelosos en las redes. Primero han de remozar su presencia online, pues ya no pueden usar su antigua marca ahora que han dejado sus labores de representación de la Casa Real. De momento han lanzado su nueva marca, Archewell, una fundación en honor a su hijo Archie que se dedicará proyectos solidarios y educativos. Además, el príncipe Harry ha lanzado Travalyst, una firma de turismo ecológico. Sabemos también que Meghan ha contactado con la poderosísima Angelina Jolie y tiene el favor de Tom Cruise para comenzar a reclutar a las estrellas de Hollywood en sus ambiciosos planes. Asistimos, sin duda, a los primeros pasos de lo que podríamos considerar un reinado viral y alternativo de la monarquía británica. Una especie de pareja heredera en acogida en Estados Unidos que, por su trascendencia en el universo paralelo de las redes sociales, se convierte en eterna rival de la pareja heredera sobre el terreno británico. Una situación inédita y apasionante para el futuro de todos los 'royals'.
20 de enero-18 de febrero
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