La vida en verde de Elsa Pataky: «Mi alma siempre ha estado en la naturaleza. Es el sueño que he perseguido»

Al pensar en una actriz que triunfa en Hollywood, lo habitual es imaginarla recorriendo las calles de Beverly Hills con un smoothie, unos Louboutin y un Birkin como parte del starter kit que indica que ha alcanzado la fama. Pero el estilo de vida de Elsa Pataky es más cercano al de la doctora Quinn que al del personaje que interpretó en Di Di Hollywood. Mientras que muchas presumen en sus redes de yates y fiestas, ella sube vídeos en los que alimenta a sus gallinas.

Byron Bay, en el sureste de Australia, se ha convertido en su paraíso particular. Allí vive con su marido, el actor Chris Hemsworth , y sus tres hijos en plena naturaleza, junto al mar. Es ahí, por cierto, donde también residen Zac Efron y Natalie Portman, y donde Nicole Kidman grabó Nine Perfect Strangers. También es el lugar desde el que inaugura hoy, 25 de septiembre, el Mercedes-EQ Welife Festival, el encuentro para entender y practicar la conexión de mente, cuerpo y alma, aprender a cuidarnos y vivir mejor, que Vocento celebra este fin de semana en Madrid y que se puede seguir a través de la web www.welife.es.

«Me siento muy honrada de estar entre figuras como la doctora Jane Goodall y el doctor Mario Alonso Puig - asegura la actriz sobre otros dos de los participantes en el evento-. No me puedo comparar con ellos, pero sí puedo aportar mi granito de arena desde un punto de vista más personal y menos científico. Supongo que todos nos hemos ido dando cuenta de lo importante que es luchar por la sostenibilidad, pero cuando eres madre descubres lo que significa que, en un futuro, tus hijos no puedan disfrutar de la fauna, la naturaleza y el mundo en el que vivimos. Tenemos que informar a nuestros hijos sin asustarlos; ellos son el futuro, los que pueden continuar con este cambio sin caer en nuestros errores. Es una generación más consciente y hay que darle la esperanza de que puede cambiar el mundo».

« Podemos llevar la sostenibilidad a nuestro día día al asegurarnos de apagar las luces de casa, no usando demasiado agua, reciclando lo máximo posible, evitando los plásticos, reutilizando y huyendo del consumo excesivo. Son conceptos básicos que hemos de saber y que podemos aplicar a nuestras vidas. Es importante presionar a los políticos y las grandes compañías para que hagan esos cambios. También lo es trabajar con organizaciones que se dedican a reforestar. Nosotros colaboramos con la Organización de Protección del Medio Ambiente WildArk, y hemos comprado 300 acres de tierra que se van a reforestar con eucaliptos para los koalas. Si las grandes compañías pudiesen acercarse a estas organizaciones y borrar la huella de carbono, devolverían a la naturaleza lo que gastan. Como consumidores, lo fomentamos comprando productos de empresas que promueven estas acciones, o apoyando a organizaciones que contribuyen a ellas. Esa es la forma en la que podemos presionar».

Al hablar de su filosofía zero waste [residuo cero], en más de una ocasión pregunta cómo se dicen ciertas palabras en español y se le escapan interjecciones anglosajonas que demuestran que wow”está más presente en su vida que olé. Solo hablo español con mis hijos. Me paso el día hablando en inglés y, cuando la temática es la sostenibilidad, me cuesta encontrar las palabras precisas en español«, explica. No es la única. Cada vez que Chris Hemsworth lo intenta, se topa con la mofa de sus tres hijos. No ha tenido muchas oportunidades de volver a España, así que su español no va muy bien. Espero que podamos pasar algunos veranos para que amplíe su vocabulario, dice.

«Vivo en plena naturaleza, por lo que no necesito mucho. En mi armario hay prendas cómodas, no necesito tener el último modelito. Me he vuelto menos consumista y mucho más relajada, asegura tras reconocer que jamás se ha visto inmersa en la espiral hollywoodiense de otras actrices. Cuando tengo que promocionar una película es cuando saco esa parte más glamourosa, pero no es parte de mi día a día. Ni siquiera cuando vivía en Los Ángeles. Nunca he vivido en Hollywood y siempre he estado cerca de la playa. Me gusta la moda, pero mi pasión son los caballos y los animales. Aunque nací y crecí en Madrid, mi alma siempre ha estado en la naturaleza y en el mar. Ese siempre fue mi sueño y es el que he perseguido. Cuando eres joven, has de crecer como persona y trabajar. Pero cuando lo has hecho, buscas algo que te llene más. Jamás podría volver a vivir en una gran ciudad. De hecho, cuando por motivos laborales Chris y yo tuvimos que pasar un tiempo en Sydney, me sentí rara. Echaba de menos mi casa; tener mis pollos, mis gallinas, mis caballos; vivir entre árboles y salir descalza sin preocuparme por lo que me voy a poner».

Se refiere a los rodajes de dos de sus tres próximos estrenos, Interceptor y Carmen, películas con las que ha cumplido otros sueños. En la primera, el de interpretar a una heroína que no necesita superpoderes, pero sí características que comparte: una férrea disciplina y una fuerza fruto de un estricto entrenamiento. «Me encanta demostrar a mi hija que puede ser una heroína, que no tiene límites. Esa sensación es increíble: enseñarle que si quiere, puede ser más fuerte. Hay que desterrar la idea de que el género masculino es el más fuerte. Y en Interceptor interpreto a una soldado que está por encima de cualquier obstáculo».

Es inevitable hablar de la forma física de Elsa, que aunque comparte nombre con una princesa Disney se asemeja más a un personaje de Marvel. La ciudad de Los Ángeles le abrió los ojos a nuevos retos de entrenamiento, gracias a los cuales ha escrito dos libros junto al entrenador personal Fernando Sartorius. A través de la app de su marido, Centr, ayuda a sus usuarios a «ser más sanos, felices y estar seguros en sus cuerpos»con las clases de yoga que imparte. «Chris y yo nos retamos mucho, tanto a nosotros mismos como entre nosotros. Siempre quiero ir a más y ponerme nuevos retos. Para Interceptor me impuse hacer flexiones con una mano. Empecé haciendo dos y ahora hago siete. Lo bonito de retarse es no compararse con otros y no saber lo que puedes llegar a hacer».

Su increíble y cincelada silueta no es, sin embargo, del gusto de todos. «Hay quienes me comentan que prefieren que las mujeres sean menos musculosas, pero a mí me gusta ser atlética. Desde niña he visto las Olimpiadas y he admirado los cuerpos de las corredoras de 100 metros. Mi sueño era tener un cuerpo así, es algo que admiro. Si alguien cree que mi silueta es demasiado atlética, lo que tiene que hacer es respetar que es mi cuerpo y mi decisión. Ese es el problema de las redes, que los comentarios hacen daño y hacen que la gente se sienta insegura».

La actriz decidió quedarse en casa hasta que sus hijos crecieran por deseo propio, porque era el momento de que Chris brillara y porque sabía que ella también tendría el suyo. «Lo que viene, viene. No tengo ninguna ansiedad si no trabajo: quiero estar contenta conmigo y con lo que hago. Para aceptar un proyecto, tiene que atraerme. Soy consciente de que soy muy afortunada por poder estar sin trabajar. Puedo decidir si me interesa un proyecto o si prefiero estar en casa, disfrutando de la familia. La verdad es que los niños van creciendo y por eso ahora tengo más tiempo para lo que era mi pasión: actuar». Si llegara el papel de su vida, ¿se plantearía dejar atrás sus horarios familiares? «Al final, Chris y yo siempre nos apañamos. Mi anterior película iba a grabarse en una época en la que él no trabajaba, pero todo cambió. Ha sido la primera vez que hemos coincidido. Fueron tres meses en los que me centré más en mi trabajo. Suelo llevar a los niños al colegio y los recojo, pero en esa época solo podía acostarlos. Lo bueno de nuestra profesión es que solo son tres meses...».

Lo que no se le pasa por la cabeza es sumarse a la tendencia por la que tantas celebridades han apostado: hacer un documental biográfico. «¡Ni hablar! Cuanto más discretos seamos y cuanto menos sepa la gente de nuestra vida, mejor. Como actor, cuanto menos sepan de ti, más se sorprenderán en la pantalla. Con las redes sociales lo sabemos todo de muchos famosos, pero la verdad es que te expones porque tú quieres».