Lamine Yamal, el benjamín de La Roja. / GTRES

El benjamín de la selección

Los secretos de Lamine Yamal, el joven héroe de La Roja: su familia, el significado de su nombre y el bautizo de Messi

Con sus 17 años recién cumplidos un día antes de ganar la Eurocopa, Lamine Yamal se ha convertido en la gran sensación de la competición a base de goles y humildad.

Para intuir el potencial de superestrella que tenía el precoz Lamine Yamal (Esplugas de Llobregat, 2007) nos remontamos a la segunda jornada de la pasada temporada. Tras una victoria de su equipo, el Fútbol Club Barcelona, ante el Cádiz, el lateral izquierdo blaugrana Alejandro Balde hizo lo que muchos jugadores hacen después de un partido, y cambió su camiseta por la de otro futbolista. Pero, a diferencia de la tradición, Balde se llevó la de uno de sus compañeros. La prenda pertenecía al chaval que acababa de convertirse en el más joven del Barça en debutar en la Liga española.

Solo han tenido que pasar un puñado de meses desde ese momento para que Lamal se haya convertido en una sensación internacional al ganar con la selección española la Eurocopa 2024. Su golazo ante Francia sirvió para certificar una calidad descomunal que le ha valido ser nombrado el mejor jugador joven del torneo, además de superar récords en posesión hasta ahora de un tal Pelé.

Junto a Nico Williams, ha llevado la alegría y la diversidad a una selección que se ha reencontrado con su público a lo grande tras años de no lograr ningún triunfo importante. Y lo ha hecho desde la humildad, como se empeñan en señalar los que le rodean. Sobre todo su familia, que crió al delantero en Rocafonda, un barrio obrero y multicultural de Mataró. Allí es todo un héroe y él devuelve el cariño de sus fans celebrando sus goles haciendo con las manos un '304', el código postal de su barrio.

Lamine Yamal no solo recuerda sus orígenes cuando marca, ya que también suele llevar esos tres números tan importantes para él serigrafiados en sus botas, junto con las banderas de los países de origen de sus padres –Guinea Ecuatorial y Marruecos– y sus iniciales.

Una familia humilde volcada con su hijo

El enorme interés que está suscitando el joven delantero formado en La Masía también ha hecho que sus padres y hasta su abuela se conviertan en figuras reclamadas por los medios de comunicación. Antes de la final de la Eurocopa, su padre, Mounir, hablaba con 'TardeAR'. Mientras la reportera del programa de Telecinco describía a la familia de Lamal como «personas muy amables, cercanas, no les gusta mucho el foco de atención, pero no dudaron ni un momento en atendernos. Están de los nervios por esta final, nos dicen que tiembla el barrio con los partidos de España», su progenitor calificaba al futbolista como «una bendición de Dios». Después añadía que estaba «muy contento y orgulloso» de su hijo, resaltando que «la humildad es lo más importante para un ser humano y no se debe perder. Lamine Yamal, para bien y para mal».

Lamine Yamal en la Eurocopa 2024. / GTRES

Su madre, Sheila, también está muy unida a su pequeño, para el que eligió un nombre de lo más especial. Al parecer, cuando este nació, su familia pasaba por un mal momento y fueron dos personas las que ofrecieron su ayuda a la familia. Los nombres de esos bondadosos seres humanos eran Lamine y Yamal y por eso se los pusieron al bebé. Por cierto que esos nombres en árabe también tienen un fuerte significado: 'honesto' y 'belleza'.

Este nuevo chico de oro que acaba de aprobar cuarto de la ESO y siente auténtica devoción por su familia, también está muy unido a su abuela paterna. Ella es la que vino desde la localidad marroquí de Tánger para cuidarle cuando sus padres se divorciaron. Como manera de devolverles este cariño, les ha comprado a los tres sendas casas. Todo un detallazo.

La fotos virales del 'bautizo' de Messi

Más allá de las fotos de Lamine Yamal celebrando los éxitos de la selección española en la Eurocopa, las imágenes suyas que más sensación han causado estos días se remontan al momento en que era apenas un bebé. En ellas aparece feliz en una bañera llena de espuma, bañado por su madre. Hasta aquí todo normal. Pero luego le vemos nada menos que junto a un joven y risueño Leo Messi, que no parece tener del todo claro cómo bañar a un niño.

Corría el año 2007 y Messi ya era el nuevo niño mimado del Barcelona, un año antes de despegar con Pep Guardiola y a dos años de ganar su primer Balón de Oro. ¿Pero cómo se pudo producir aquel mágico y profético momento? Resulta que los padres de Lamine Yamal habían ganado un sorteo en Mataró, su pueblo natal, a 32 kilómetros de la Ciudad Condal, para que su hijo participara en una sesión de fotos dentro de los vestuarios del Camp Nou para un calendario benéfico.

La familia Yamal colgaba las imágenes en Instagram el día en que un golazo del joven lanzaba a España hacia la victoria en la semifinal contra Francia. Un gol precioso, ajustado al palo desde 25 metros y vital para que a la postre ganáramos la Eurocopa. El simbolismo era imposible de ignorar. ¿Quizás Yamal había sido bendecido con la magia de San Lionel? ¿Habría transmitido su genio a través de un baño de burbujas? «No lo sé», se encogía de hombros el padre del futbolista al responder a esta pregunta en una entrevista con el diario 'Mundo deportivo'. «Para mí, mi hijo es el mejor en todo. Lo supe cuando nació. Sabía que iba a ser una estrella. Todos los padres lo saben. Todo padre quiere que su hijo sea el mejor».