ÚLTIMOS AVANCES Mujerhoy Cancer Care 2023: «Pedir una segunda opinión cuando te han diagnosticado cáncer debería ser obligatorio»

Mujerhoy ha organizado una nueva edición de su encuentro Mujerhoy Cancer Care para dar a conocer los últimos avances en materia de diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama y ginecológico.. La cita fue en el auditorio de la Fundación MD Anderson Cancer Center España, en colaboración con La Roche Posay y con el asesoramiento médico de MD Anderson Cancer Center Madrid.

El evento, articulado en torno a dos mesas redondas, reunió a un prestigioso plantel de expertos, que arrojaron luz sobre las terapias más novedosas y ofrecieron algunas claves sobre cómo enfrentarse a la enfermedad.

Durante el primer coloquio, «Innovar para vivir.  Avances en radioterapia, tratamientos y protocolos en cáncer ginecológico y de mama», los doctores señalaron que si bien el cáncer de mama afecta a unos 34.000 nuevos casos al año en España, la buena noticia es que la tasa de supervivencia a cinco años del cáncer de mama es de 86%.

«La detección y el tratamiento precoces han elevado mucho los períodos de supervivencia tras el diagnóstico de un cáncer a una mujer. Por esta razón son tan importantes las revisiones anuales, en especial para los cánceres ginecológicos. Y junto con esta prevención tenemos que avanzar en la precisión, con el objetivo de anticipar el diagnóstico y avanzar también en todo lo relativo a las posibles toxicidades de los diferentes tipos de tratamientos», apuntó el doctor Javier de Santiago, jefe del Servicio de Ginecología Oncológica de MD Anderson Cancer Center Madrid.

De Santiago también incidió en la importancia de pedir una segunda opinión cuando a una persona le detectan un cáncer. «El impulso es querer que te traten inmediatamente, pero vale la pena consultar con otro experto, porque una semana no es determinante en la evolución de la enfermedad y, sin embargo, te permitirá escoger la mejor opción», remarcó.

Los intervinientes hablaron también de cómo han evolucionado las técnicas de tratamiento, entre las que cobra una gran importancia la radioterapia. La doctora Natalia Carballo, jefa del Servicio de Radioterapia de MD Anderson Cancer Center Madrid, ahondó en este tema: «Los avances en tecnología de radioterapia han sido muy rápidos en estos últimos años.

Ahora tenemos la capacidad de hacer cosas asombrosas con tratamientos muy complejos y, al mismo tiempo, muy eficaces. Curar, pero sin generar complicaciones en el futuro: este es el gran progreso que se ha conseguido. Los tratamientos ya no son tóxicos o no en la misma medida que antes. Ahora bien, las innovaciones son muy rápidas y, desgraciadamente, no siempre todos los centros tienen la capacidad económica para actualizar los equipos al ritmo que evoluciona la tecnología».

La cirugía robótica fue otro de los aspectos que valoraron muy positivamente los doctores, al ser una herramienta precisa y poco invasiva con respecto a cirugías y técnicas tradicionales. «Hay muchos avances en cirugía robótica. Por ejemplo, en la realización de escáneres con imágenes tridimensionales. También el Big Data nos está ayudando mucho, en especial para la detección de los cánceres de mama. Ahora mismo se está observando cómo un ordenador es capaz de contrastar numerosas imágenes de una mamografía pudiendo descifrar con una alta probabilidad de acierto si el tumor es maligno o benigno, y todo ello de una forma más rápida y agradable para la paciente», adelantó la doctora Isabel Calvo, oncóloga médica de la Unidad de Mama de MD Anderson Cancer Center Madrid.

En el segundo coloquio, «Somos un equipo, quererse para cuidarse. La pareja, el ámbito familiar y el autocuidado, principales soportes para el paciente», se abordó la importancia que tiene en la recuperación y la calidad de vida de las pacientes las personas que las rodean.

Abrió el debate Teresa Barrera, psicóloga y terapeuta individual y familiar, quien aseguró que nuestra capacidad para adaptarnos a los cambios que sobrevienen tras un diagnóstico de cáncer es un factor muy importante a tener en cuenta. «Es evidente que muchas cosas van a cambiar, desde la logística de llevar a los niños al cole hasta el impacto en el horario doméstico de las sesiones de quimio. En este proceso es esencial dejar un espacio al tsunami emocional que se avecina. Hay que permitirse el miedo y las dudas que despierta el cáncer antes de asumir el tratamiento y racionalizar la enfermedad. Hacer como si no pasara nada es un mecanismo de defensa de muy corto recorrido. Tarde o temprano hay que adaptar la vida ordinaria a esta enfermedad».

Coincidió con esta recomendación Arantxa Ruiz, supervisora de Enfermería de MD Anderson Cancer Center Madrid. «Es esencial implicar a la paciente en los tratamientos, explicarle la posible toxicidad de los mismos y animarle a que se cuide, porque eso va a influir en su recuperación y en su estado de ánimo. Una paciente que entiende las consecuencias del tratamiento y que se cuida las va a tolerar mejor. En este sentido, muchas veces vemos toxicidades tempranas que no deberían aparecer y que se pueden deber a malos hábitos del paciente, como que no se ha hidratado lo suficiente, que ha tomado el sol o que sigue fumando. El cuidado previene estas consecuencias no deseadas. Esto es esencial, por ejemplo, en los tratamientos de radioterapia, en los que la piel se ve muy afectada y, por tanto, hay que prepararla para llegar a las sesiones en las mejores condiciones. Y esto es igual de válido antes, durante y después del tratamiento.».

Las participantes señalaron que los tratamientos de radioterapia y quimioterapia tienen consecuencias importantes en el aspecto físico y en la piel, que queda muy dañada. Tratar estos problemas no solo es una cuestión de salud, sino también estética, mencionaron, y aunque parezca frívola, no lo es, porque ayuda a la autoestima de la paciente.

«Hay que cuidar la piel, que es nuestro órgano más generoso. Cuanto mejor esté esta barrera que es la piel, mejor resistirá y los efectos secundarios serán menores. El problema de la piel es que sus células se multiplican muy rápidamente y, por esta razón, son muy susceptibles en los tratamientos de quimio o radio. Es imprescindible usar fotoprotectores de amplio espectro tras un tratamiento de quimioterapia, porque haga o no sol las radiaciones llegan a la piel, es una cuestión de salud. Pero incluso el maquillaje, tiene también un efecto positivo. Hay estudios que confirman que cuando la paciente se cuida, la radioterapia y los otros tratamientos generan menos estrés y mejora la calidad de vida», aseguró Leonor Prieto, directora científica de La Roche Posay.

Finalmente, Luz Sánchez Torralba, presidenta de la Junta de Pozuelo de la AECC y paciente de cáncer, resaltó lo importante que es mantener una actitud vital positiva y envió un mensaje alentador. « La alegría y la positividad son básicas para enfrentarse a esta enfermedad. Yo siempre intento ver el lado bueno de las cosas. Todos tenemos mochilas, ya sean con enfermedades o otras desgracias, pero hay que saber sacar lo bueno de cada circunstancia. Ayudo a los demás, porque es gratificante para ellos y también me ayuda a mí misma. Intento visibilizar mi enfermedad para dar ánimos a otras personas. Evidentemente, hay cosas malas, como una sesión de quimioterapia, pero explicada de una manera adecuada puede aliviar el sufrimiento de otras personas. Claro que tienes que permitirte decir que hoy no puedo, tal vez mañana, sí. Se pasa mal, pero los pacientes de cáncer también tenemos que disfrutar de nuestros días buenos».