Pistas para el éxito de tres escritoras que han logrado un bombazo superventas con su primera novela

Sí, se puede dar en el blanco en el primer intento. Y sí, que lleguen a nuestras manos tres primeras novelas con tantísimo éxito internacional no es nada habitual. De hecho, al mundo editorial le cuesta apostar por nuevos talentos,probablemente porque el gran público lector prefiere comprar caras conocidas a recién llegadas. En este caso, por suerte, se han roto todos los esquemas de ventas. Las novelas de la francesa Géraldine Dalban-Moreynas, de la madrileña Virginia Feito y de la estadounidense Patricia Lockwood han explotado, cada una con una estrategia literaria distinta pero inteligentísima. No te vayas, porque estas son las novelas que vas a devorar y a regalar sin parar en 2022.

Nadie se muere de amor (Grijalbo), la novela de Géraldine Dalban-Moreynas, ya es superventas en Francia y de hecho se llevó el Prix du Premier Roman en 2019. Desde el título, podríamos esperar un topicazo erótico-romántico, pero la escritora novata ha logrado un retrato en primera persona adictivo e incisivo de una relación adúltera que arde en cada página. Dalban-Moreynas, periodista, relaciones públicas, jefa de comunicación del Ministerio de Igualdad en 2016 y finalmente apasionada de la decoración con negocio propio, toma un tema clásico, eterno e irresistible y lo deja en cueros: la descripción de la vivencia del flechazo, el cortejo, el sexo y ese enganche físico-emocional que suscita el enamoramiento resulta tan revelador como familiar. Hasta la página 122 todo es pasión y adoración. Entonces, la protagonista predice: «Ya sé cómo acabará esto. Tú te quedarás tan tranquilo con tu mujer y tu hija en tu bonito apartamento con parquet y molduras y yo lo perderé todo».

Poco se habla de esto (Apha Decay), de Patricia Lockwood (Indiana, 1982), viene en volandas desde Estados Unidos, donde ha sido finalista del Booker y el Woman Prize en 2021, además de entrar en la lista de los 10 mejores libros del año para The New York Times. Puede parecer un libro en las antípodas del de Dalban-Moreynas, pero nos volvemos a encontrar con un relato en primera persona (llamémoslo autoficción) que se nutre de lo íntimo. Eso sí: aquí el campo de exploración no es nada común y lo que recibimos resulta, por tanto, mucho más hilarante e interesante. Lockwood, ingeniosa ensayista y crítica millennial para prestigiosísimas revistas como The New Yorker o London Review of Books, disecciona la vida online con la precisión de una cirujana plástica. Todo es patético-ridículo, hasta que la realidad irrumpe y lo rompe todo. Aquí la realidad es el nacimiento en la familia de una niña con el síndrome de Proteus, que causa excesivo crecimiento de la piel y desarrollo anormal de los huesos, como le pasaba al hombre elefante de David Lynch.

La señora March (Lumen), la novela con la que ha arrasado la madrileña Virginia Feito (33 años) es, aparentemente, más clásica. No tira de autoficción, sino de un terror del todo clásico (Feito es fan de Shirley Jackson), con una protagonista de la alta sociedad estadounidense totalmente neurótica y francamente irresistible. De hecho, lo que la ha puesto en órbita esta novela es la buena idea de escribir en inglés un relato del todo cinematográfico del que sale, sin mucho esfuerzo, un guión que cualquier actriz pagaría por interpretar. La que ha pagado es Elizabeth Moss, quien ya ha encargado a Feito el libreto de la película. La protagonista señora March, pobre mujer sola casada con un escritor de éxito, se sumerge en su propia imaginación con resultados desastrosos. Lo que le espera allí es su propio vacío: está sumida en un mundo de apariencias que la convierte en víctima y verdugo. Si en este momento has pensado en las influencers, buena intuición.