Silent Night: apocalipsis y humor negro para una comedia anti-Navidad

Con la cartelera de final de año centrándose en el género musical y modernizando el romance que hizo historia en los 60 o alertándonos del fin del mundo las producciones navideñas parecen relegadas a las plataformas de streaming. Pero no exclusivamente, porque hoy llega a los cines de toda España una comedia ambientada en la Navidad. Y en el fin del mundo. Silent Night, protagonizada por Keira Knightley (Piratas del Caribe) y Matthew Goode (Downton Abbey), le da una vuelta a este tradicional género para apostar por el apocalipsis y el humor negro con una comedia que hará las delicias de todos aquellos que aborrecen estas fechas.

Nell (Knightley) y Simon (Goode) son un matrimonio británico que junto a sus hijos deciden pasar las fiestas navideñas en una mansión en el campo, en compañía de sus mejores amigos de la universidad. Pero no serán unas celebraciones habituales, porque un gas venenoso de origen desconocido recorre Europa y el fin del mundo está a la vuelta de la esquina. Lejos de dejarse llevar por el pánico, este peculiar grupo afrontará las celebraciones con mucho humor negro y, obviamente, como si se tratase de la última Navidad.

Ganadora del galardón del Gran premio del Público y el galardón al mejor guion en el último Festival de Sitges, Silent Night es una historia que entre bandejas de canapés y copas de champán critica los privilegios de las clases altas, la paternidad, el racismo o la inacción política. Un tema, este último, que está inevitablemente relacionado con la labor que el gobierno británico ha llevado a cabo durante la pandemia.

Junto a Knightley y Goode en el reparto de Silent Night encontramos varias caras conocidas del mundo de la interpretación. Roman Griffin Davis, el niño de Jojo Rabbit, encarna a su hijo Art, mientras que sus hermanos Hardy y Gilby serán los gemelos Hardy y Thomas. Annabelle Wallis (Peaky Blinders) es la engreída Sandra, mientras que Sope Dirisu (Gangs of London) es un apuesto médico nigeriano que acude a la cita junto a su bella esposa estadounidense, diez años más joven, interpretada por Lily-Rose Depp (Voyagers).

Escrita y dirigida por Camille Griffin, madre de los tres hijos del matrimonio protagonista, en la cena de Navidad de esta producción se unen las revelaciones propias de quienes sienten que se les acaba el tiempo a las preguntas de los más jóvenes del grupo, que se mueven entre la inocencia y la cruda realidad. El resultado es una historia con un final previsible, por supuesto, pero con mucha mala leche en su desarrollo. Noventa minutos en los que los adornos navideños y mesas elegantemente preparadas chocan con un ambiente impropio de lo entrañable de la cita. Que agrade al espectador solo depende de la intensidad de su espíritu navideño.