Cómo hacer una dieta de adelgazamiento si no te gustan las ensaladas

Es verdad que se suele asociar la dieta de adelgazamiento indefectiblemente con las ensaladas. Ensalada fría para comer, otra ensalada para cenar… puede llegar a aburrir, y mucho. Pero hay trucos para adelgazar de forma sana y efectiva sin tener que optar siempre por la típica ensalada y te explicamos cómo.

Cuando se empieza una dieta para perder esos kilos de más, uno de los platos más recurrentes es la ensalada, incluso cuando salimos a comer y queremos mantener la línea lo primero que nos viene a la cabeza para hacer una comida saludable y baja en grasa es también pedirle al camarero una ensalada. ¿No hay más formas de adelgazar que poniéndonos encima el yugo de la eterna ensalada? Por supuesto que sí, pueden gustarte y acabar harta o bien pueden no gustarte nada y querer tener más opciones de menús para adelgazar que una ensalada.

El comer ensaladas frías aporta mucha fibra y un efecto saciante inmediato, pero los vegetales crudos como la lechuga pueden causar, problemas digestivos, flatulencias y pesadez. Y qué diablos, que no se puede estar todo el día a ensaladas aburridas porque al final esas dietas se frustran y vienen los atracones a causa de la ansiedad. Seguro que sabes de lo que hablamos ¿verdad?

Está claro que hay que evitar comida precocinada, alimentos procesados, azúcar, reducir la ingesta de carbohidratos como pan, pasta, arroz, bollería industrial, patatas… e incluir en los menús sobre todo vegetales, frutas, grasas saludables (aceite de oliva, aguacate, frutos secos…) y proteínas de calidad. ¿Pero cómo puedes hacer por ejemplo una cena saludable sin tirar de la sempiterna ensalada? Muy fácil ¡cocina los ingredientes!

Al cocinar las verduras ya le vas a añadir más sabor a tus platos. Champiñones, calabacín, pimientos, setas a la plancha, espárragos verdes salteados con ajo… Cocina tus vegetales a media temperatura en la sartén, el horno o al vapor, si le pones especias a tus elaboraciones les darás otro toque más para hacer de tus platos delicias culinarias bajas en grasa.

Pensarás que con lo fácil que es hacer una ensalada fría te va a quitar mucho tiempo cocinar los ingredientes. Es verdad que lleva algo más de tiempo, pero no mucho más, sobre todo porque puedes dejar tus elaboraciones preparadas con antelación con el método batch cooking, cocinando un día para poder comer toda la semana.

Solo con hornear unas simples zanahorias añadiéndoles especias ya has ganado en sabor y tu paladar te lo agradecerá. Chips de batata al horno, brochetas de verdura… puedes cambiar tu típico plato de verduras saludable muy fácilmente.

¿Verdad que no es lo mismo una ensalada fría de lechuga, tomate y atún de lata que un revuelto de setas, gambas y espárragos trigueros o una ensalada tibia de lentejas, calabaza, quinoa y espinacas salteadas? Variar en los menús y que nos parezcan atractivos es una pieza clave para que la dieta tenga éxito.

La dieta cetogénica o la dieta paleo son buenísimas alternativas para llevar una dieta de adelgazamiento eficaz sin tener que recurrir a diario a una ensalada. En este tipo de dietas la base es reducir los carbohidratos y elegir grasas saludables como el aguacate, las semillas o los frutos secos, combinándolas con verduras y una porción de proteína como huevo, pollo o pescado. Un plato mucho más atractivo que una insípida ensalada rápida y que te ayuda a adelgazar al mantener tus niveles de azúcar en sangre estables.

Puedes hacer dietas low carb en las que incluyas en tus menús platos tan apetecibles como noodles de calabacín con salsa boloñesa, pizza con base de coliflor o de pollo, tortitas de batata, brownies de plátano y dátiles… miles de ideas para que no te aburras en tu dieta y que no te impulsen a saltártela porque estarás comiendo de forma variada y deliciosa.

Como ves, hay muchas opciones para elegir en una dieta de adelgazamiento así que puedes olvidarte de las clásicas ensaladas y disfrutar de platos sabrosos y saludables sin miedo a que tu figura se resienta.