belleza
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Vivimos en la época de la boca exuberante, pero unos labios gruesos, como todo, solo son bonitos si resultan armoniosos. Conseguirlos con infiltraciones y que parezcan naturales es casi como encontrar una aguja en un pajar, una tarea solo al alcance de los grandes maestros de la medicina estética. Así que no te empeñes en engrosarlos a cualquier precio, porque en la mente de todas están estropicios antológicos… y no vamos a dar nombres. Nosotras optamos por la vía más conservadora y, por cierto, reversible: simular unos labios más carnosos recurriendo a algunos trucos de maquillaje, que bien aplicados hacen milagros. Toma nota:
· Nunca jamás caigas en el error de perfilar los labios por fuera, porque queda muy artificial y revelarás el engaño a la primera de cambio. Delinéalos al ras de la línea del contorno.
· Para evitar un efecto emborronado, si no utilizas perfilador, o que quede el delineado al descubierto en cuanto te hayas tomado un café, aplícate un primer de labios antes de empezar a maquillarlos, así te asegurarás de que el carmín no se desplace ni desaparezca a la primera de cambio y afloren tus labios finos.
· Evita marcar demasiado el arco de cupido. Cuanto menos contorneado esté y más redondeados dibujes los dos salientes, más gruesos parecerán los labios. Para conseguir este efecto, haz como los maquilladores profesionales y empieza a delinear la boca desde las comisuras hacia el centro, no al revés.
· Para crear un efecto de labios más gruesos elige carmines con acabados satinados y huye de las texturas mates, que los afinan.
· El color también tiene su importancia. Los tonos más oscuros (granates, burdeos, cerezas…) achican los labios; opta por los anaranjados, corales, melocotones o fucsias. Y si eres de colores más pálidos, tipo nude, que se declinen en rosado, nunca en marrón.
· Importantísimo: elige un perfilador un poco más claro que el color del pintalabios; si lo haces al contrario, afinarás más los labios.
· Un toque de gloss en la parte central del labio inferior dará luz a esa zona y creará la sensación óptica de labios con más volumen. Si eres mañosa esto también puedes conseguirlo con un contouring de labios, combinando dos tonos de pintalabios de la misma gama cromática. Solo tienes que maquillar el contorno más oscuro, dejar el claro para el interior y difuminarlos en la transición.
· Las más expertas pueden probar una técnica que emplean los profesionales y que da buenísimos resultados: aplicar alrededor de los labios un corrector un tono más claro que la base de maquillaje.
Y si a diario no tienes el tiempo para poner en práctica todos estos consejos, quédate con tres imprescindibles: delinea al ras, elige colores vibrantes y pon un poco de brillo en el centro del labio inferior. Y, en todo caso, no hay por qué renegar de unos labios finos; si los tuyos se parecen más a los de Gwyneth Paltrow que a los de Scarlett Johanson, ¡quiérete como eres!
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