belleza
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Dicen que los ojos son el espejo del alma y ellos no solo reflejan nuestro estado de ánimo, sino que también pueden delatar nuestra edad, ya que son la zona del rostro en la que suelen aparecer las primeras arrugas. Por eso, utilizar un buen contorno de ojos a diario es crucial para evitar arrugas, ojeras y bolsas. Después, el maquillaje también puede ser de gran ayuda; aunque hay que tener en cuenta que este no se aplica igual cuando se tienen veinte años que cuando ya se han pasado los cuarenta. Te sacamos de dudas.
Debes usar a diario, por la mañana y por la noche, una crema específica para el contorno de ojos. Tanto el párpado como el área debajo del ojo deben estar adecuadamente hidratados, pero no grasientos. Aplica el contorno también unos minutos antes de maquillarte.
Al igual que aplicas base en tu rostro para disimular pequeñas imperfecciones, puedes hacer exactamente en la zona ocular. El primer no solo hará que tus sombras aguanten perfectas más tiempo sin cuartearse, sino que también atenuará las arruguitas del párpado. Y, si lo aplicas también en la zona de las ojeras antes de extender el corrector, hará que este permanezca intacto durante más tiempo.
Los extremos nunca fueron buenos. Tanto los acabados brillantes como los mate tiende a acentuar imperfecciones de la piel, como arrugas y la flacidez. Recuerda que menos es más y, si quieres un extra de luz en tu mirada, será mejor que optes siempre por los acabados atinados en vez de por los brillantes.
Una buena sombra de textura cremosa y con un acabado satinado es imprescindible, ya que se funde con la piel de la zona, embelleciéndola de forma natural. Además, lo mejor de estas fórmulas es que una amplia variedad de niveles de cobertura, que van desde los acabados casi transparentes hasta los más opacos.
La máscara es un paso imprescindible para agrandar la mirada y debes usarla tanto en las pestañas superiores como en las inferiores. Mejor si eliges una fórmula waterprof y, si te parece que el color negro endurece demasiado tu mirada, opta por un tono marrón o borgoña. Eso sí, no te olvides de usar previamente el rizador, ya que es un paso que hace que tus ojos se vean más abiertos y más grandes. Y, para las ocasiones especiales, no dudes en usar pestañas postizas.
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