El secreto de la mirada enorme de Camille Gottlieb son las extensiones de pestañas (y sabemos cómo conseguirlas)

Camille Gottlieb, la hija pequeña de Estefanía de Mónaco que jamás heredará el trono, se ha convertido en toda una sensación en Instagram. Sus mensajes body positive a pesar de haber perdido 14 kilos la han convertido en una de las royals más queridas de las redes sociales. Y es que ella no se siente tan encorsetada como otros miembros de la familia real monegasca (no, no hablamos de su madre en sus mejores tiempos) y no le importa mostrarse tal cual es en sus publicaciones de Instagram.

En uno de sus últimos post no hemos podido evitar fijarnos en sus maravillosas y larguísimas pestañas. ¿Cómo lo conseguirá? Porque por muy buena genética que tenga, unas pestañas tan largas y espesas son muy difíciles de tener de manera innata. En un primer momento pensamos en la utilización de pestañas postizas, pero un resultado tan natural es muy difícil de conseguir con este tipo de productos. Y entonces se nos ocurrió: ¡Extensiones de pestañas!

¿Te has planteado alguna vez acudir a un centro especializado para colocarte unas extensiones de pestañas? Es la forma más cómoda de conseguir una mirada más abierta y penetrante. Lo primero que tienes que saber es que la base de las extensiones serán tus propias pestañas, por lo que es importante que estén fuertes y sanas para que sean un éxito y no se caigan a las primeras de cambio. Fortalécelas con una máscara con aceite de ricino antes de acudir a tu centro de confianza.

A cada pelo de tu pestaña se añade uno nuevo de material sintético o seda pegado con un pegamento especial. Se usan para mejorar la curvatura, densidad, grosor y longitud de tus pestañas naturales. Cada sesión dura una hora y media como mínimo y tendrás que retocártelas  cada tres o cuatro semanas. Pero aunque puede resultarte muy trabajoso, una vez tengas tus extensiones de pestañas no necesitarás usar máscara para notarlas más largas, gruesas y curvadas y las pestañas postizas quedarán olvidadas en el fondo del cajón.