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Nos obsesionamos con el volumen del pelo por muchas razones: porque es una señal de juventud y negar la edad se ha convertido en el primer objetivo de nuestras rutinas de belleza; porque en realidad es una cualidad innata sobre la que no tenemos demasiado control (y nos encanta perseguir lo inalcanzable); y porque las famosas aparecen con melenas cada vez más abundantes, a veces hasta desproporcionadas. No hay que agobiarse: esta abundancia suele tener truco. Y las que tenemos el pelo fino o escaso podemos beneficiarnos de esta fijación por el volumen gracias a los cortes , técnicas y productos de última generación que buscan engordar las melenas globales.
Suya es una de las melenas más icónicas del cine español: la hemos visto hecha una cascada de rizos naturales a los 20 y ahora, en su versión más discreta, lisa y capeada. Los estilistas de Penélope Cruz le sacan el máximo partido a la hora de buscar el volumen: tanto el corte como el color y el acabado maximizan el efecto óptico voluminizador.
La actriz y modelo británica lleva como nadie el corte a capas: es la manera más efectiva de conseguir volumen para un pelo fino que se quiere llevar por debajo de los hombros. Gracias al movimiento de las capas se produce un efecto óptico volumizador inmediato. Importante: que el largo de las capas armonice perfectamente con las facciones.
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La protagonista de "El lobo de Wall Street" tiene un cabello extremadamente liso y no demasiado abundante, por eso fue una gran idea cortarse una melena que tenía que volumizar con extensiones y planchas sí o sí. Este "bob" largo admite un peinado natural, sin tantas imposturas, y permite no someter al cabello a un estrés innecesario.
Otra ventaja del "bob" para las mujeres con el pelo muy fino: al prescindir del peso de las melenas largas, es más fácil que el pelo gane volumen al rizarse u ondularse, ya sea naturalmente o con la ayuda extra de productos de fijación y las planchas.
La protagonista de "House" o "Tron: Legacy" también llevaba una melena larga, casi siempre recogida u ondulada, a pesar de tener el cabello extraordinariamente fino. La decisión de cortar por lo sano y optar por un "bob" que no toca los hombros no pudo ser más acertada. Con ese largo es más fácil conseguir cierto cuerpo y volumen gracias a productos que aumentan el grosor del pelo y la ayuda salvadora de las planchas.
Úrsula no tiene ningún problema con la cantidad o grosor de su pelo, pero su corte de pelo "pixie" es perfecto para las mujeres con el cabello fino: con este largo es facilísimo usar productos de "styling" para lograr volumen en la parte superior.
El primer paso hacia una melena con más cuerpo es elegir cuidadosamente el champú y el acondicionador: optemos sí o sí por uno diseñado expresamente para aportar volumen. Casi todas las líneas específicas son efectivas, aunque haciendo prueba y error terminaremos encontrando el que mejor le va a nuestro pelo. Este champú de Kiehl's con proteína de trigo y miel optiene máxima puntuación de las usuarias en múltiples plataformas de venta (20 euros, 250 ml).
Las mujeres que tenemos el pelo fino solemos ser bastante incrédulas con los productos que nos promente más cuerpo. Sin embargo, este gel (15, 48 euros) no hace más que recibir aplausos y buenas críticas de las usuarias. Basta con aplicar una pequeña cantidad en la raíz del pelo y proceder al secado. No deja el pelo reseco ni pegajoso, pero sí requiere una buena técnica de "brushing" .
Puede que sea el consejo que más cuesta poner en práctica, aunque sea ha revelado central a la hora de ganar volumen: es imprescindible secar el pelo boca abajo, en la dirección contraria a la que nace y ahuecando siempre el pelo desde la raíz. Mejor si, además, utilizamos un producto que ayuda en la tarea, como el gel Big Sexy Hair. La tarea es un poco pesada y, además, con los viejos secadores podemos hasta quemarnos. El nuevo secador de Dyson (desde 300 euros) lo hace más fácil, pues regula automáticamente la temperatura del chorro de aire. Este es, además, tres veces más potente, con lo que podemos trabajar de manera más precisa y rápida.
Estamos ante una evolución del champú en seco, uno de los productos que aplicados en la raíz logran engrosar inmediatamente el cabello (aunque deja una textura un poco rara). Osis, el nuevo champú en seco de Schwarzkopf (15,35 euros), añade pigmentos para morenas, castañas y rubias. Como el champú de Kiehl's, lleva almidón de arroz. Se pulveriza dos o tres veces sobre la raíz para conseguir volumen y cero grasa. Lo podemos usar también como producto de acabado, para obtener la melena despeinada tan típica en las francesas.
Aveda tiene una línea llamada "Pure abundance" que, efectivamente, logra engrosar el cabello fino de manera palpable (hasta un 17%). Además del champú y el acondicionador, este texturizador (28,50 euros) aporta volumen al instante y crea una textura mate. Potencia el cabello con agentes volumétricos naturales, entre los que se incluyen el caolín y la goma arábiga. Al espolvorearlo sobre las manos pasa a transformarse en una loción ligera que se puede usar sobre el cabello húmedo o seco, aunque lo idea es vaporizar directamente sobre la raíz y proceder al secado boca abajo.
La modelo canaria tiene una preciosa melena castaña que sabe sacarle partido a los trucos voluminizadores: no solo lleva un corte a capas que le aporta movimiento y textura, sino que su colorista ha sabido aplicar el color de manera de forma que ciertas zonas de luz produzcan el efecto óptico de un pelo con más cuerpo. Importante: por lo general, las mechas uniformes al uso no ayudan a crear la ilusión de más pelo.
La diva del pop latino no suele mostrar su pelo al natural: su abundancia no alcanza a los estándares leoninos que está imponiendo la industria del "showbusiness". Sin embargo, cuando lo hace comprobamos que pone en práctica todos los trucos de los mejores estilistas: se apunta a la media melena; juega con el color para iluminar allí donde quiere marcar más volumen (en su caso, de medios a puntas); y no duda en usar texturizadores que aporten más cuerpo instantáneamente.
En realidad, las estrellas del audiovisual y la música suelen usar extensiones en sus apariciones en la alfombra roja y en los editoriales de moda y de publicidad. Hace algunas años aún era un secreto bien guardado de las famosas, pero hoy se han convertido en un complemento más que ni siquiera trata de pasar inadvertido, como sucede en las largas colas de caballo que suele llevar Ariana Grande, Nicky Minaj o la misma Jennifer Lopez.
En España, las famosas no son tan abiertas como las estadounidenses a la hora de revelar sus trucos de belleza, sobre todo en lo que a extensiones se refiere. Sin embargo, las extensiones son habituales en las melenas de las estrellas que hacen publicidad de productos para el pelo y también en los editoriales de moda de casi todas las artistas que tienen el pelo muy liso o poco voluminoso. Todas sufrimos a partir de los 35-40 años una pérdida gradual de cuerpo en el pelo que, en el caso de las actrices, se compensa con extensiones.
La manera más rápida y directa de conseguir volumen en un cabello fino es recurrir a las ondas. Las planchas de cerámica han alcanzado hoy una calidad tecnológica suficiente como para no estropear demasiado nuestra melena, sobre todo si usamos protectores para el calor. Sin embargo, si nos acostumbramos a usarlas varias veces a la semana, es mejor optar por aparatos de última generación que eliminen totalmente la posibilidad de que se nos rompa el pelo. Los rizadores de Dyson Airwrap (desde 400 euros) nos permiten secar, dar volumen y moldear un cabello fino con asiduidad, sin temor a quemarlo.
De todos los "looks" capilares de las famosas, elegimos el de Elsa Pataki como el más favorecedor, natural, estiloso y fácil de llevar para las mujeres que tenemos el pelo fino, sobre todo después de los 35-40 años. Aquí están todas las claves de un buen "styling" para aumentar el volumen: un buen ahuecado, un color entero (no olvidemos que teñir engorda el cabello) con puntos de luz, texturizadores y ondas deshechas para un acabado aparentemente descuidado. Un diez.
