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Si te has levantado con un dichoso ‘ bad hair day’, los semirecogidos serán tus salvadores capilares, ya que son capaces de disimular algún mechón rebelde sin necesidad de pasar a la operación gomina extrafuerte. Lo mejor es que son muy fáciles de hacer, pero muy aparentes. Si, además, le añades algún accesorio capilar, tipo lazo, pasador o, incluso, horquillas, el éxito está asegurado. Toma nota de nuestras idea porque te serán muy útiles los días en los que no sabes qué hacer con tu cabello.
Lucy Hale demuestra que incluso las chicas de pelo corto pueden sacarle partido a las cintas. Basta con recoger la zona alta del pelo con una y hacer lo mismo con la zona media. Eso sí, la clave está en dejar el flequillo y algunos mechones sueltos.
El moño alta deshecho es una apuesta segura para cualquier ocasión. ¿Te apetece darle un ‘twis’? En vez de recoger toda la melena en él, coge solo una parte de ella, dejando unos mechones delanteros sueltos y sujeta el recogido con un lazo de terciopelo o de tul.
Moño parece, coleta no es. Aunque no lo creas, este híbrido entre los dos recogidos estrella es fácil muy apañado y fácil de hacer. Hazte una coleta, dejando dos mechones laterales sueltos. Luego enreda ambos justo encima de la goma y sujétalos con la ayuda de unas horquillad de moño. Si quieres, puedes añadir un pasador, a modo de adorno, en la parte superior.
Si estás indecisa entre llevar el pelo suelto o recogerlo ligeramente, esta opción está hecha para ti. Basta con que cojas unos mechones superiores y hagas un nudo entre ellos, dejando el resto del pelo a su aire. Un toque de spray texturixante y un par de horquillas cruzadas harán que no se suelte.
Olvídate de esconder las horquillas para que no se vean sobre tu pelo y decora con ellas tu semirecogido. Coge dos mechones de la parte superior de las orejas, retuércelos ligeramente (dos vueltas son suficientes) y sujétalos cruzando varias horquillas en la parte trasera.
A pesar de su sencillez, este peinado es elegante. Peina la parte superior de tu melena hacia atrás, asegurándote de dejar la parte de arriba ahuecada, y átala con un elástico. Termina envolviendo un mechó alrededor de la goma para que no se vea..
A veces un simple accesorio de pelo es suficiente para aportar un toque diferente. Este peinado clásico, con un pasador a media altura, se puede llevar tanto con el pelo liso, como ondulado o rizado.
¿Te atreves con un look un poco más complicado? Tras ondular tu melena, hazte una trenza de raíz en la parte superior derecha y otra en la izquierda. Sujétalas con un par de gomas muy pequeñas y después anúdalas. Termina abriendo un poco el trenzado y ¡voilà!