Las mejores mascarillas de pelo para un resultado de peluquería: melena más suave y sedosa

Encontrar la mascarilla de pelo perfecta no es misión imposible (aunque a veces lo parezca). Lo más importante es conocer tu cabello y qué necesidades tiene: si lo tienes fino, busca fórmulas ligeras con proteínas vegetales; si está dañado por tintes o planchas, mejor una que contenga queratina , aceites nutritivos o lípidos reparadores. Y si es rizado o rebelde, la hidratación profunda con mantecas como la de karité es tu religión.

El segundo truco tiene más que ver con el cuándo y el cómo. Aplicar una mascarilla una vez a la semana está bien, pero si de verdad buscas ese efecto wow, conviértela en tu momento de autocuidado. Póntela con el cabello húmedo, escúrrelo bien antes (para que no se diluya) y déjala actuar al menos 10-15 minutos.

Además, si te envuelves el pelo con una toalla caliente, mucho mejor. El calor ayuda a que los activos penetren mejor y el resultado es mucho más visible. Truco de experto, de nada. Por último, confía en las fórmulas que prometen resultados reales: que aporten brillo, suavidad, fuerza y, sobre todo, que no dejen el cabello apelmazado.

Wella Professionals Ultimate Repair. Es ese producto que todas necesitamos tener en la ducha. ¿Por qué? Porque trata el cabello como si fuera piel: con mimo, ciencia y resultados visibles. Su tecnología con AHA y Omega-9 detecta las zonas más dañadas de tu melena y las repara sin apelmazar, dejando el pelo suelto, liso y brillante. Además, promete un desenredado hasta seis veces más fácil.

Aveda Botanical Repair Rich. Si hablamos de lujo botánico, hablamos de Aveda. Su mascarilla Botanical Repair Rich nutre, repara y fortalece, además de hacerlo con una fórmula rica, vegana y con ingredientes naturales al 94%. ¿El resultado? Una melena visiblemente más sana desde el primer uso.

Virtue Restorative Treatment Mask. Su fórmula a base de su famosa Alpha Keratin 60ku, una proteína casi idéntica a la del cabello humano, penetra, repara y fortalece sin apelmazar. ¿El resultado? Pelo que se nota más fuerte, más suave y más brillante. Ideal para quienes han castigado su melena con tintes, planchas o simplemente el paso del tiempo.

Mascarilla capilar de Abruzzo con ácido hialurónico de Rossano Ferretti. Formulada con ácido hialurónico, manteca de karité y aceites de frutas, es la aliada perfecta para domar el encrespamiento y devolverle al cabello su suavidad natural. Y lo mejor: no apelmaza. Apta incluso para cabellos finos, su aroma dulce a melocotón y caramelo te transporta a un verano eterno en la costa italiana.

Amika The Kure Intense Bond Repair Mask. Si tu pelo está seco, dañado o pide auxilio, esta mascarilla de Amika tiene una fórmula ultra rica que repara la fibra capilar desde dentro gracias a proteínas veganas y aceites vegetales. ¿Lo mejor? Aunque es potente, no pesa. Apta para todo tipo de texturas, desde lisas hasta rizadas, consigue ese equilibrio difícil entre hidratación profunda y ligereza.

Color Wow Money Mask. La mascarilla Money Mask de Color Wow hace exactamente lo que promete: dejarte una melena de portada. Sus activos marinos mediterráneos hidratan profundamente, fortalecen la fibra capilar y aportan ese brillo de pelo sano que tanto cuesta conseguir. ¿Tienes el cabello teñido o decolorado? Esta fórmula nutre y potencia el color, evitando el efecto apagado.