Aunque su uso no es muy común, lo cierto es que la miel resulta muy beneficiosa para la piel y el pelo. Es por ello que ya nuestras abuelas la usaban en todo tipo de remedios caseros. Y tenían buenos motivos. Se trata de un ingrediente presente en la naturaleza que es perfecto para reparar el cabello dañado. Además, tiene propiedades nutritivas y rejuvenecedoras.
Es especialmente recomendable si tienes el cabello seco, ya que ayuda a retener el agua. Esto lo mantiene hidratado y, por tanto, le da un aspecto más sano. También tiene propiedades emolientes que aportan brillo y vitalidad incluso a los cabellos más dañados. El resultado es una melena suave y fuerte al mismo tiempo.
Por suerte, ya no hace falta recurrir a experimentos caseros con los que es difícil dar en el clavo. Existen productos formulados con miel que resultan más efectivos. Hoy te traemos dos mascarillas capilares que son un ejemplo de ello. Incluyen la miel entre sus ingredientes y son ideales para cuidar tu melena durante el otoño.
La primera es Color Seal Mascarilla, de Apivita. Pertenece a una nueva gama de productos de esta marca que está especialmente indicada para los cabellos teñidos o con mechas. Además de con la miel de tomillo, la línea cuenta con las proteínas de quinoa como ingrediente principal. Estas contienen aminoácidos que ayudan a mantener el brillo y el color.
La mascarilla tiene una textura cremosa. Nutre y repara el cabello en profundidad. Además, proporciona una protección extra frente a las puntas abiertas y mejora la resistencia del pelo.
Otra buena opción es Tesoros de Miel de Original Remedies (Garnier). Se trata de un remedio reconstituyente para el pelo dañado y quebradizo. No solo lo repara, sino que también lo protege y le da fuerza. Además, tiene una textura cremosa que evita que el cabello se apelmace.