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A comienzos de este año los tonos cobres y pelirrojos tuvieron un boom gracias al papel de Anya Taylor-Joy como Beth Harmon en la serie Gambito de Dama. Pero no se trata de la única pelirroja icónica, el mundo del espectáculo tiene a muchas abanderadas de este tono: desde actrices como Jessica Chastain, Emma Stone o Christina Hendricks (que su tono de cabello natural es el rubio) a cantantes como Florence Welch o Geri Halliwell. Gracias a ellas y a sus increíbles melenas, muchas mujeres soñamos con cambiar nuestro tono de cabello y dar la bienvenida a nuestras vidas al cobrizo.
El problema principal de los tonos de tinte cobrizo es que tienden mucho más que otros hacia la oxidación y es probable que, con los lavados, el tono pierda fuerza y tienda hacia un naranja más apagado. Para conseguir que esto no ocurra, es importante incorporar a la rutina de cuidado capilar productos específicos como champús, acondicionadores o mascarillas, que ayuden a avivar el color.
Con un 96% de ingredientes naturales, este acondicionador repigmenta tanto los cabellos naturales como los teñidos, mientras neutraliza los reflejos indeseados, nutre y proporciona suavidad al cabello. Su fórmula además de cuidar, acentúa los reflejos y fija el color durante más tiempo. (43,90 euros)
Coloración tono sobre tono que permite personalizar el tono del cabello. Sin amoniaco, está disponible en 37 tonos y tiene una duración de hasta seis semanas, ayudando a reavivar el color y a crear reflejos sobre la base que aportan luz al cabello. (13,95 euros)
Perteneciente a la gama de cuidado de la firma sueca, sus productos preservan el brillo del cabello como si estuviese recién teñido, gracias a su fórmula con ingredientes naturales entre los que destaca la granada. Se trata de un activo con propiedades antioxidantes. (29 euros).
Esta rutina, compuesta de champú, acondicionador y mascarilla, está creada para cuidar el color mientras fortalece la fibra capilar gracias a la tecnología RCT. Su mascarilla, además, aporta suavidad y brillo a la melena tras su aplicación. (33,60 euros)
En formato mascarilla de color, nutre el pelo mientras renueva el color sin amoníaco ni peróxido en su fórmula. Si buscas un tono más intenso y fuerte, aplícatelo durante quince minutos en lugar de los tres recomendables en cada aplicación. Está disponible en tonos diferentes según el matiz de tu tinte. (14,95 euros)
En formato sólido, este champú está pensado específicamente para proteger el color de melenas con tonos cobrizos mientras le proporciona hidratación y brillo. Con olor a naranja y lavanda, este champú tiene ingredientes veganos y está hecho en España. (12,90 euros)
La tecnología de este champú está formulada específicamente para mantener los tonos rojos tras las decoloraciones. Entre sus ingredientes se encuentran la ciruela y la granada que ayudan a intensificar el color del cabello durante 12 semanas. Se recomienda utilizarlo tres veces por semana. (7,95 euros)
Bain Chromatique Gentle cuida el color, intensificando los reflejos y el brillo hasta 40 días. No cuenta con sulfatos y está pensado para potenciar el color natural, así como también el color en los cabellos teñidos. (22,20 euros)
Esta gama proporciona luz a los cabellos teñidos gracias a su fórmula con aceite de rosa mosqueta, que protege también contra la oxidación y la degradación del color. Su mascarilla, proporciona nutrición y suavidad al cabello y está enriquecida con un lípido perfeccionador que está inspirado en un componente esencial de la capa protectora del cabello. (57,30 euros)
Además de cuidar los cabellos teñidos conservando el brillo y el tono como si estuviese recién teñido, este champú está formulado con aceite de argán y queratina para evitar que se encrespe de la raíz a la punta. (5,95 euros)
