Cómo cuidar tus tatuajes en verano

Los tatuajes están de moda, en versión mini, sobre todo, aunque también hay quién se apunta a los XXL. Y si hay un momento propicio para lucirlos es ahora, en verano, cuando dejamos al descubierto los brazos, las piernas, el abdomen y más… si estamos en la playa o en la piscina.

Pero el verano puede ser también un momento complicado para los tatuajes, especialmente para los más recientes que deberás cuidar con gran mimo para evitar las infecciones.

- La higiene es fundamental para evitar cualquier problema. Utiliza un jabón con ph neutro para lavarlo dos o tres veces al día y aplica la pomada que te hayan recomendado. No lo frotes con la esponja y realiza también un secado cuidadoso.

- Evita mojar el tatuaje en el mar o en la piscina durante el primer mes. Tampoco es recomendable baños prolongados en agua caliente, el vapor de las saunas, o la sudoración excesiva. La ducha diaria no es un problema pero estos baños podrían dañarlo.

- Evita rascarte si te pica o eliminar las costras formadas durante el periodo de cicatrización, ya que podrías causar infecciones y alterar el tatuaje.

- El sol podría irritar tu piel si el tatuaje es reciente, y además puede hacer que pierda color y brillo. Así que lo ideal durante el primer mes es no exponerlo a los rayos solares, cubriéndolo con ropa de algodón.

- Lo más importante es protegerlo del sol y mantener tu piel hidratada. Así que utiliza siempre una protección alta cuando vayas a exponerte a los rayos solares. Puedes utilizar un protector normal pero también hay algunos específicos para pieles tatuadas.

- Después de un día de sol en la playa o a la piscina, dúchate para eliminar los restos de cloro, sal y fotoprotector e hidrata bien tu piel y de forma específica tu tatuaje para que luzca más bonito.

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