¡Lúcelas sin miedo! /
Ya sea por su forma, sus redondeces o su textura, las piernas en esta época del año generan complejos a manta. Pero, en serio, es posible darles un giro de 180º . Si a estas alturas del verano sigues sin apearte del vaquero, sigue leyendo. Estos tratamientos funcionan.
Nos referimos al drenaje linfático, uno de los tratamientos más eficaces que existen en el mundo de la estética. La retención de líquidos, responsable del aspecto inflado y regordete de tobillos, rodillas y muslos, a menudo tiene fácil solución. Eso si, no vale cualquier drenaje. Es fundamental que quien lo practica sea un experto. A saber, un fisioterapeuta especializado en esta técnica 100% manual que reconduce líquidos estancados que más tarde son expulsados de forma natural. Se trata de un tratamiento. O sea, que no vale con hacérselo solo una vez, sino que lo ideal para conseguir resultados es someterse a uno de estos masajes dos veces al mes (pero siempre depende de lo que te diga el experto). Después de un drenaje la pierna se afina, reduce diámetro y se aligera. Además no es nada caro (rondan los 60 euros). Los drenajes de Cecilia Mirapeix, en Clínica Dermatologica Internacional, son un diez.
Clases de ballet durante dos meses. Es la propuesta de la ex bailarina Gloria Morales, responsable de traer a España el método ballet fit, que arrasa en EEUU. Se trata de una disciplina que mezcla técnicas propias del ballet con un trabajo de fitness intenso. La idea es poner a tono especialmente las piernas -pero no solo estas- en tiempo record. Esta técnica es ideal para aquellas cuyas piernas han perdido forma tras el paso de los años, a causa de aumentos de peso, falta de ejercicio... Las clases de ballet fit definen la musculatura interna -tan difícil de recuperar-, afinan el tobillo y perfilan la rodilla. Para más información: www.atacadas.com.
Alimentación y ejercicio son imprescindibles. Aunque los tratamientos específicos para esta zona también ayudan. /
Se llama Bioslimming y es un masaje totalmente manual que combina maniobras enérgicas y movimientos drenantes con la aplicación de productos reductores. Es ideal para activar las zonas frías (donde se acumula la celulitis) y movilizar grasas. Tras las maniobras necesarias se aplican una serie de activos específicos y se cubren las piernas con una ligera capa de film osmótico (el calor potencia el efecto de la técnica). Lo ideal es someterse a 6 sesiones durante 4 semanas. Reduce radicalmente el tamaño de los depósitos de grasa y afina la piel de naranja. El tratamiento ronda los 550 €. En Gema Cabañero (Madrid), Instituto de belleza Adela (Orense) o Cosmeceutical Center (Sevilla).
Se llama Vella Shape III y, tras años de estudios clínicos y una larga experiencia, ha demostrado que consigue resultados muy interesantes cuando el problema no se soluciona con un masaje manual. Nos referimos a aquellas mujeres en las que la acumulación de grasa unida a la celulitis y la r etención de líquidos ha deformado por completo las piernas. Este aparato destruye los adipocitos (células grasas) por calor a través de una potente combinación de tecnologías: infrarrojos, vacumterapia y radiofrecuencia. Es muy es eficaz a la hora de movilizar esa grasa localizada que no elimina ni el deporte ni la dieta. Eso si, si no acompañas el tratamiento con un poco de ejercicio semanal y cuidas tu alimentación, la grasa eliminada vuelve a depositarse en el mismo lugar. En la Clínica Francesa (Barcelona).
Lleva varios años ocupando uno de los primeros puestos en el top de tratamientos reductores veraniegos y es que la carboxiterapia da resultados en muy poco tiempo. Es un tratamiento basado en el poder de una sustancia “detergente”, el ácido desoxicólico. Está indicada para mujeres que no tienen exceso de peso, sino pequeños cúmulos de grasa en zonas localizadas (rodillas, cartucheras, zona interna del muslo) porque acaba con la grasa superficial pero no la antigua. Lo ideal es someterse a 1/2 sesiones por semana. Precio: 60 € por sesión. Para mujeres con grasa profunda es más efectiva la técnica de Prostolane, que son inyecciones profundas de un gel compuesto de péptidos y ácido hialurónico, que destruyen la grasa para después reconducirla y eliminarla a través del hígado y los canales linfáticos. Se suelen recomendar de 2 a 4 sesiones. Precio: 200 € por sesión. En Clínica Menorca (Madrid).
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