Los mejores cinco after sun para tu rutina de belleza

Razones para no olvidarte

Vuelves al hotel tras un día de playa y estás más cansada que un jueves por la noche de tu semana laboral. Y eso que no has hecho nada más que cambiar de postura en la tumbona. Ese agotamiento físico es real y se debe a que tu cuerpo ha estado trabajando a pleno rendimiento durante todas esas horas al sol. Lo ha hecho para controlar la agresión que ha estado sufriendo tu piel, que se estaba quemando, y para contrarrestar la enorme deshidratación que se ha producido por el calor que los rayos UVA han acumulado en tu organismo. Eso ha elevado tu temperatura y, solo para hacerla descender a niveles normales, tu cuerpo ha dedicado todos sus recursos. ¡Normal que estés cansada!

A tu cuerpo le viene de maravilla una ayuda para reducir ese acaloramiento que los rayos UVA han producido en tu piel. Porque varias horas después de haberte expuesto al sol es cuando más notas que, al tacto, tus brazos, tu cara y tu espalda están a nivel de hervor. Los after sun de efecto frío buscan rebajar la temperatura con activos refrescantes como el mentol o el aloe vera. Pero también recuperar los niveles normales de hidratación. Porque el agua en tu interior es lo que utiliza tu organismo de forma natural para regular su temperatura. Fundamental es también huir de texturas demasiado emolientes, porque sellan el calor sobre tu piel y alargan el sufrimiento.

Lo de vivir en biquini parece asegurar el bronceado aunque no tomes ni el sol. Pero eso es si estás de vacaciones. Cuando toca regresar a la ropa de oficina, tienes la sensación de que el moreno se te escapa ya en el viaje de vuelta. El quid de la cuestión está en la melanina. Cuando llegas a la playa pálida como un folio necesitas al menos un par de días de exposición al sol para que esta empiece a funcionar y a sintetizarse a toda máquina. Pero una vez que se pone en marcha, también se toma su tiempo para dejar de actuar. Ese es el mecanismo que se encarga de prolongar los complejos presentes en las fórmulas maximizadoras del bronceado. Hasta un mes de moreno puedes ganar si empiezas con ellos ya.

Nos ponemos en el peor de los casos. Te has dormido al sol y estás achicharrada. La quemadura va a tardar entre seis y 24 horas en mostrar su peor cara. Tienes que atajarlo cuanto antes. El after sun es esencial porque contiene activos potentes para bloquear las proteínas nocivas que tu cuerpo genera por la inflamación. También lleva ingredientes calmantes para contener y reducir la hinchazón, vitamina E para reiniciar las funciones de regeneración de tu piel y antioxidantes para eliminar los radicales libres dañinos que se van a apilar a tu alrededor durante horas. Lo solucionan con una textura muy hidratante ultraligera.

Tanto si hay quemadura como si solo hay indicios, la capacidad de regeneración de la piel se va a ver comprometida por el proceso inflamatorio que está teniendo lugar en tu piel. En ese momento, vas a necesitar un after sun hidratante con activos calmantes para bajar esa hichazón. Pero un poco más adelante (uno o dos días después) tu piel va a agradecer una reactivación de su capacidad de reparación natural. Para eso sirven lípidos y aceites específicos, como el de rosa mosqueta o el de grosella negra, con efectos nutriviso beneficiosos demostrados que ayudan en la cicatrización.

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