Así consigue su piel de porcelana la reina del orden Marie Kondo

Seguro que no te sorprende: la rutina de belleza que se dedica Marie Kondo es tan ordenada como su propio método . Cuenta con una ventaja de partida evidente: posee la piel inmaculada típica en las mujeres asiáticas. Pero también es cierto que se cuida de mimarla: por ejemplo, jamás toma el sol . Para salir siempre se pone protección solar alta y un sombrero. Su maquilladora de cabecera, Megumi Asai, ha contado que uno de los secretos de su look límpido son las extensiones de pestañas : acentúan el blanco de su piel.

Los tratamientos 'beauty' que elige la reina japonesa del orden suelen estar producidos sin química, si es posible al cien por cien. Su crema hidratante es de una marca japonesa, Three, en un 98% compuesta por ingredientes naturales. Cree firmemente en la bondad de los elementos que ya están en la naturaleza y en que una vida y una alimentación ordenada son la clave de una piel sana y bonita. Por eso consume bastante "amazake", una bebida japonesa de arroz fermentado con muchísimas vitaminas y enzimas benéficas para la dermis. Y jamás, jamás, se olvida de su ritual de limpieza, cada noche.

La fórmula que Marie Kondo prefiere para disolver (más que arrastrar) y eliminar las impurezas y el maquillaje de su piel es el aceite, cero agresivo y consistentemente hidratante. Además, al ser de camelia, multiplica sus beneficios: antienvejecimiento, antioxidante, cicatrizante, antimicrobiano... Una maravilla para la dermis.

Este es uno de los secretos mejor guardados de Marie Kondo para mantener su piel impecable: no deja que aparezca ningún brillo, pero se resiste a tapar la piel con capas de polvos. Por eso, utiliza papel de arroz que absorbe el más mínimo brillo que pueda aparecer en su piel. Deja el maquillaje intacto.

La piel de Marie Kondo no requiere realmente un maquillaje que alise y tape imperfecciones, sino una base ligera que deje ver la calidad translúcidad de su piel de porcelana. Por eso, muy habitualmente se limita a usar esta 'primer' de Laura Mercier, que es muy fresca y le aporta mucha luz, bajo una capa finísima, mínima, de maquillaje.

Marie Kondo no suele maquillarse demasiado, pero si lo hace siempre es buscando brillo. Por ejemplo, con este labial de Clarins, el Clarins Rouge Eclat, en rosa cereza. La clave: su durabilidad.

La crueldad que esconden las extensiones de pestañas

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