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A las madres, como a la mayoría de las mujeres del mundo entero, les encantan los perfumes. Y si este viene avalado por un diseñador de moda, aún mejor. Pero para acertar con el aroma ideal para celebrar el Día de la Madre debes conocer sus gustos: si se inclina más por los olores florales, cítricos o con notas amaderadas. Y también es importante que te fijes en su concentración. El Eau de Toilette o EDT presenta mayor versatilidad, es el ideal para usar de día y en climas calurosos. Tiene una duración aproximada de 4 a 8 horas. Si te decantas por un Eau de Parfum o EDP, también conocido como millésime, es el que presenta una concentración alta que resulta idónea para usar de tarde-noche, en cualquier estación del año.
Entre estas 12 primicias olfativas, comprobarás que se encuentran algunas reediciones de clásicos a los que tu madre ya ha podido caer rendida. Ahora, cuando le descubras la versión inédita, quedará impresionada. Y desde luego, no hay que olvidar el detalle de los nuevos frascos, encantadores, originales, elegantes y divertidos.
Una fragancia oriental que reinventa el aroma de la clásica Alien de Thierry Mugler. Su fusión radica en el toque especiado de la canela con la sensualidad de la vainilla. Este encuentro de notas fascinantes hace que su aroma sea embriagador, potente y muy magnético. (Eau de Parfum; 87 €).
Reinterpreta el aroma de la piel al rozarla. Sale luminosa y limpia gracias a la frescura de la bergamota, mandarina de Calabria y la pimienta rosa. Después aparecen el sándalo, el jazmín de Egipto y unos acordes de lino. La sensación gourmand la otorga la vainilla. (Eau de Parfum; 68,90 €).
La fragancia original (Gucci Bloom) adquiere más intensidad en una versión de chypre con toques florales que captura el auténtico carácter femenino. Rosa de Bulgaria, nardos, madre selva y jazmín, hasta llegar al fondo con pachulí, almizcle y osmanto. (Eau de Parfum; 131 €).
Este perfume reinterpreta la clásica temática chipre de Sì Eau de Parfum y le añade un toque de neroli, la adictiva flor blanca mediterránea capaz de expresar todo el carácter floral para aportar una experiencia más intensa y exuberante. Combina los acordes de mandarina verde y la enérgica grosella negra, ingrediente estrella en todas las fragancias Sì, con las notas de fondo de la vainilla y el almizcle blanco. (Eau de Parfum; 74,95€).
La saga Mon Paris continua con esta fragancia que aparece con sus toques a cítricos y melocotón, que van dando paso a un corazón floral en el que rosas, jazmines, azahar, magnolias y peonías son las protagonistas para un fondo profundo y sensual de maderas, pachulí y almizcle. (Eau de Parfum; 70,90 €).
Fragancia afrutada y floral que aparece con una explosión de notas de bayas rojas y negras, arándanos y frambuesa; un corazón de acordes florales de jazmín y violeta, y un fondo de maderas blancas, ámbar seco y almizcle. (Eau de Parfum; 70 €).
Inspirada en la cautivadora Venecia, una de las ciudades preferidas de Gabrielle Chanel, es una composición que destaca por sus contrastes, entre frescor y sensualidad. Si bien los cítricos todavía tejen el hilo conductor, aquí el neroli permanece en segundo plano. Los frutos rojos se unen al lirio y al geranio de Grasse para dar paso a la madera de cedro y a el acorde ambarino. Aunque se percibe la nota avainillada y los aromas orientales, sus efluvios son sutiles. (Eau de Toilette; 112 €).
Para traducir esta impresión optimista y alegre surge el acorde de campari italiano del perfume original, formado con facetas iridiscentes de notas florales, como jazmín, flor de ciruelo y peonía, y frutas chispeantes, como grosella negra y limón. (Eau de Toilette; 97 €).
Floral y frutal, esta nueva aportación a la colección Daisy del diseñador aparece con un alegre y vivo color amarillo, en representación a los rayos de sol, a los largos días de verano y al optimismo y felicidad que transmite esta estación del año. En esta ocasión se compone únicamente por tres notas olfativas: la fresa blanca aporta un tono afrutado y dulce, la caléndula es la encargada de dar vida a su corazón floral y las cálidas maderas blancas son las encargadas de finalizar. (Eau de Toilette; 64 €).
Contiene un desfile de notas que comienza con deliciosos y adictivos acordes afrutados y cítricos, de mandarina y manzana, que se combinan el sutil aroma de magnolia, para abrir paso a un corazón floral, fresco y aterciopelado de peonía, grosella blanca y jazmín. El fondo fusiona sándalo, amberwood y almizcle, que alargan la duración del perfume. Su diseño divertido de cristal es caricaturesco y optimista, un osito de peluche tierno. (Eau de Parfum; 88 €).
Esta nueva incursión en la colección Replic’ de la maison es oriental, especiada y amaderada, para trasladar con su aroma a un día rodeado de libros en una misteriosa biblioteca ancestral. Acordes de papel y madera encerada, combinados con el haba tonka y el absoluto de vainilla. (Eau de Toilette; 95 €).
La fragancia se viste de encaje en una edición limitada para coleccionistas. Una interpretación exclusiva de alta costura en homenaje a las creaciones de la maison. Las notas blancas (azahar, jazmín y nardo) se entrelazan con notas más oscuras y misteriosas de vetiver y pachulí. (Eau de Parfum; 92 €).