belleza
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El tiempo para restaurar el planeta se nos acaba, así que se impone tomar decisiones urgentes. “Tenemos una década para actuar”, puntualiza Jean-Paul Agon, presidente y CEO de L’Oréal. Y sabe de lo que habla, porque el grupo de belleza lleva décadas implicado en esta labor de contribuir a un mundo más sostenible, reduciendo su impacto medioambiental en toda la cadena de valor de sus cosméticos.
Preocupada por el entorno, pero también por los derechos sociales y la dignidad de las personas, la compañía se ha marcado dos objetivos prioritarios en su ambicioso programa L’Oréal for the Future. Por una parte, el apoyo a mujeres altamente vulnerables, para lo que destinará 50 millones de euros a un fondo de donaciones benéficas. Y, por otra, la regeneración de los ecosistemas y el desarrollo de la economía circular, a lo que dedicará una inversión de 100 millones de euros. Además, trabajará para ayudar a sus 1.500 millones de consumidores en todo el mundo a limitar su huella de carbono y animarlos a que tomen decisiones sostenibles.
En España, la fábrica de la compañía en Burgos es todo un referente en industria sostenible, pues es la primera planta neutra en emisiones de carbono.
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El 100% de los centros industriales y de los edificios de trabajo tendrán un impacto positivo en la biodiversidad.
El 100% de los envases de plástico serán rellenables, reutilizables, reciclables o transformables en compost.
El 95% de los ingredientes serán de base biológica, derivados de minerales abundantes o de procesos circulares.
El 100% de los nuevos expositores tendrán un diseño ecológico, según los principios de la economía circular.
El 100% de los plásticos utilizados en los envases procederán de fuentes recicladas o de base biológica.
El 100% de los residuos de los centros de producción se reciclarán o reutilizarán.
Se reducirá un 20% los envases de los productos.