Cremas de farmacia efectivas y súper baratas que dan resultados en poco tiempo sea cual sea tu tipo de piel

Mascarillas, medicamentos... y también dermocosmética. Las farmacias ganan terreno como uno de los establecimientos preferidos para adquirir productos de belleza. La seguridad que ofrecen favorece la confianza del consumidor. “La piel está expuesta a continuas amenazas y desde la farmacia damos respuesta cada año a más de 10 millones de consultas relacionadas con este tema”, puntualiza Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos.

De acuerdo con los datos de la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (Stanpa), el canal farmacia es el que ha registrado una evolución más reseñable en el sector beauty en nuestro país durante la última década. Según explica su responsable de Área de Formación y Conocimiento de Mercado, Óscar Mateo, “en este tiempo su volumen de negocio se ha duplicado, aumentando de los 740 millones de euros al año a los 1.500. Las farmacias han pasado de tener 30.000 a 70.000 referencias de este tipo”. Cuatro especialistas nos explican las ventajas y diferencias de la cosmética de farmacia.

¿Por qué es aconsejable adquirir cosmética en la farmacia? MERITXELL MARTÍ: Lo más importante es nuestra competencia en la materia. La farmacia es un lugar de cercanía, podemos hacer un seguimiento y primamos la calidad del producto, no la presentación o el marketing.

¿Cuánto hay de innovación? Los laboratorios cosméticos confían cada vez más en este canal para el posicionamiento de sus productos, tan punteros o más que los que se pueden encontrar en otros puntos de venta. Nos preocupamos de tener lo más novedoso, junto con fórmulas ya consolidadas.

¿Qué lugar ocupan los tratamientos a medida? Son otro servicio añadido. Por una parte, están las fórmulas magistrales para tratar un problema específico siguiendo una prescripción facultativa; y por otra, las preparaciones oficinales, sin receta médica y elaboradas en la farmacia.

¿Qué es lo que más valora de las farmacias el consumidor? MARTA MASI: Busca, sobre todo, asegurarse la eficacia del producto. El farmacéutico puede ofrecer un asesoramiento cosmético con mayor rigor.

¿Qué consultas son las más habituales? Las dudas más recurrentes son acerca del orden de aplicación de los productos, si se pueden combinar diferentes principios activos o si son incompatibles, cuáles se pueden usar durantex el embarazo y en la lactancia... Además, sigue habiendo falsos mitos que tratamos de desterrar.

¿Cuál es el próximo desafío? La generalización del e-commerce, que ofrece la ventaja de llegar a puntos muy distantes de manera rápida.

¿Qué ventajas tiene una crema de farmacia? GEMA HERRERÍAS: Nuestro hecho diferencial es el consejo experto. Dada la amplia oferta cosmética disponible, sin asesoramiento el cliente puede equivocarse.

¿Existe ahora una mayor demanda? Sí, y estoy convencida de que es debido a la confianza del consumidor y la apuesta por los servicios especializados. Además, desde la farmacia se identifican posibles criterios de derivación al médico especialista.

¿Qué papel juega el factor precio? El punto fuerte de la farmacia es la cosmética con aval científico. Además, encuentra un equilibrio entre la eficacia y el precio adecuado.

¿Qué le diría a alguien que está perdido en el mundo beauty? Lo primero, que se conciencie de que la piel es un órgano más de nuestro cuerpo y, como tal, ha de tener muy presente qué medicamentos (dermocosméticos) le aplica. Se necesita una cualificación para conocer la galénica de los productos utilizados y saber qué ponerse, en qué dosis y para qué.

¿Qué diferencia hay entre cosmética y cosmecéutica? Básicamente, la formulación. Los cosmecéuticos no incluyen ingredientes superfluos y tienen una alta concentración de principios activos.

¿Cuáles son las ventajas de acudir a un especialista? Para la cosmecéutica, cada piel es única y debe tratarse como tal, algo que necesita de asesoramiento, prescripción y seguimiento. Y es ahí donde entra en juego el personal sanitario especializado, que haya orientado su formación en farmacia, medicina antienvejecimiento, química, medicina estética y sea capaz de controlar, gestionar y modular los signos de envejecimiento de forma sinérgica.