A pesar de que muchas veces ponemos bastante empeño en el cuidado de nuestra piel y cabello, en ocasiones no obtenemos los resultados que nos gustarían. Normalmente el problema es que estamos haciendo, sin querer, algún gesto que no le va demasiado bien a nuestra melena o a nuestro rostro. Por ejemplo, hay veces en que nos estamos lavando el pelo mal sin saberlo, otras el problema es que no nos aplicamos la crema facial adecuadamente, o no llevar a cabo correctamente el simple gesto de secarnos la cara tras la limpieza puede provocar que tengamos acné y falta de luminosidad.

Seguramente arrastres la toalla por la cara hasta que esta está seca por completo. En cambio, los expertos en piel defienden una técnica que puede aportar numerosos beneficios al rostro: el pat dry, un concepto que viene de los vocablos ‘pat’ que, significa dar una palmada, y ‘dry’ (secar, en español). “ Cuando te secas el rostro arrastrando la toalla puedes irritar la piel, porque esto provoca una exfoliación continuada de la dermis y puede provocar un arrastre de aceites esenciales del tejido, alterando así su función barrera. Pero si lo haces dando pequeñas y suaves palmadas con la toalla, el proceso será mucho menos agresivo”, asegura Raquel González, directora de educación de Perricone MD.

Manopla de secado Cleansing Mitt de Omorovicza (13 €, en purenichelabb.com). Toalla reutiliozable para eliminar el maquillaje Make Up Eraser, modelo Royal Navy (19,90 €). / d.r.

Cambiar este gesto en tu rutina de belleza diaria supondrá evitar la irritación de la piel. “Al haber menos irritación se evitan posibles procesos inflamatorios, como los brotes de acné, sobre todo ahora, cuando las pieles están hipersensibilizadas por el uso de la mascarilla”, asegura Estefanía Nieto, directora técnica de Omorovicza. Además, “cuando secas tu cara con pequeños toques estimulas el tejido, lo que facilita que esté más receptivo a los sueros y cremas que vaya a aplicar después”, añade Diana Navarro, directora técnica de Boutijour.

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