Colágeno: guía definitiva para estimular el mayor componente antiedad de nuestra piel y qué cosméticos, suplementos y tratamientos usar para estar más jóvenes que nunca (del colágeno marino al retinol)

A medida que cumplimos años nuestro cutis va perdiendo firmeza y necesitamos otros cosméticos, como este sérum antiarrugas de farmacia o el ingrediente más eficaz contra los signos de la edad. Este hecho es, precisamente, el que más aspecto envejecido otorga. El colágeno es la proteína encargada de dar estructura a la piel, aportando el volumen y tersando las facciones. Su producción se ralentiza con la edad (a partir de los 25 años) y así, la densidad de la piel disminuye y aparece la flacidez. Por eso, es necesario que incorporemos complementos que lo estimulen, en nuestra rutina de cuidado facial.

Ahora, hay una tendencia en el mercado de la belleza que utiliza el colágeno como 'claim' antiedad en los productos, ya sean de uso cutáneo o suplementos. Sin embargo, recargar el almacén de este componente no es tan sencillo. Su inclusión en las etiquetas no asegura, para nada, un resultado reafirmado. De hecho, hay otros ingredientes que lo favorecen más. Para aclarar tus dudas y que inviertas mejor tu dinero, te explicamos cómo funciona y qué cosméticos y tratamientos merecen la pena.

Para empezar, que hay que tener en cuenta es que el colágeno es una molécula grande con poca probabilidad de que la dermis lo absorba, ya que por su tamaño le es difícil penetrar. Es decir, en forma tópica, sus beneficios ayudan a conservar la hidratación, pero no a la estimulación natural de la proteína.

Mientras, la categoría de suplementos ingeribles, tan de moda en la actualidad, sí que tiene una mejor eficacia. Esto sucede porque, al introducirse en el sistema, engañan al cuerpo para que crea que debe aplicar su función regeneradora. Los estudios lo avalan, asegurando que, tras 3 meses, se observan una disminución de la reducción de colágeno, o lo que es lo mismo, se va frenando esa pérdida, así como aumenta la hidratación.

En polvo, cápsulas o gominolas, hay muchas versiones, aunque lo importante no es tanto su formato, sino otros factores como la capacidad de asimilación de nuestro cuerpo o la disponibilidad del nutriente. Los expertos aconsejan el colágeno hidrolizado, por ser más fácil de digerir y acoplarse en sangre, y también el marino, de buena síntesis. Además, se recomienda evitar alimentos con mucha azúcar, porque esto causa que las fibras de colágeno se hagan rígidas y difíciles de reparar.

Los dermatólogos apuestan por el enfoque 360, un tratamiento completo que combine ciertos ingredientes para el cuidado de la piel junto a procedimientos en clínica que trabajen en las capas más profundas, para potenciar los beneficios antiedad, si llevamos un régimen definido y continuado.

Entre los activos capaces de aumentar los niveles de colágeno, destacan 3. En primer lugar, el retinol, o más bien, todos los derivados de la vitamina A. Se ha comprobado que los retinoides favorecen la regeneración celular en lo que respecta a las fibras de colágeno y elastina, además de deshabilitar la colagenasa, enzima que destruye el colágeno. En especial, el uso tópico de la tretinoína tiene propiedades rejuvenecedoras, impulsando la producción de la proteína en la dermis.

También está el ácido L-ascórbico o vitamina C, si se incluye en porcentajes entre el 5 y el 15. O, por su parte, la vitamina B3 o niacinamida, en una concentración del 5%, que frena la aparición de moléculas reticuladas, dañinas para la elasticidad. Emplea la combinación de vitamina C y niacinamida en tu rutina de mañana y deja el retinol para la noche, o puedes apoyarlo también con niacinamida.

Existen varios tratamientos profesionales, no invasivos, que se prescriben como método antienvejecimiento y de mejora del colágeno. El uso de la luz led roja estimula los fibroblastos, segregadores de esta proteína que mantienen el marco estructural de los tejidos. El láser tiene una faceta curativa basada en la promoción de las fibras de colágeno.

La técnica de microneedling renueva y duplica los niveles de colágeno, elastina y ácido hialurónico encargado de la hidratación. Lo mismo consigue la radiofrecuencia. Los rellenos dérmicos o el Profhilo, se sirven del ácido hialurónico para rellenar la piel y aumentan el flujo de creación de colágeno y elastina a lo largo del tiempo.

Siempre consulta con tu médico la opción más viable y específica para ti, pero, con esta información seguro que ya tienes las bases para empezar a conformar los pasos de tu rutina de cuidado que frenarán el envejecimiento.