Cómo minimizar de forma eficaz la flacidez y arrugas de los labios para presumir de una sonrisa joven y atractiva

La demonización del envejecimiento en la industria 'beauty' es un mal que las mujeres sufrimos. Nos vemos sometidas a no aceptar los procesos naturales de la piel, a incesantemente corregir cualquier signo de la edad o imperfección, con tal de lucir más joven porque parece ser que esto es sinónimo de belleza. Todos los rostros sufren de igual el paso del tiempo y una piel real es una piel hermosa. Sin embargo, eso no quita que, por mucha aceptación, continuemos con cierto complejo y queramos mejor el estado de nuestro cutis al máximo.

Cada una de nosotras tiene una zona problemática que nos trae de cabeza y nos complican ciertas tareas como, por ejemplo, el maquillaje. Algunas lucharán contra las líneas de expresión de la frente, otras contra las patas de gallo y si tú eres de las que no aguanta ni un segundo más el aspecto de su código de barras, aquí te enseñamos cómo tratar de forma eficaz las arrugas del contorno de los labios.

El área de la boca es una de las más expresivas y con tanto movimiento y contracción muscular, al final aparecen las líneas de forma natural, sumado al daño solar. Esto ocurre porque el colágeno de la piel tiende así a descomponerse, ocasionando arrugas (sobre todo verticales) y la laxitud en esta área. Si bien no se pueden eliminar por completo por la inevitable gesticulación, con los cuidados adecuados sí tenemos la opción de suavizar su apariencia.

Lo primero y más importante, tanto en esta zona como en el resto del rostro, es la hidratación. La sequedad puede llegar a acelerar el deterioro de los tejidos y si mantenemos los niveles óptimos de humedad en las capas profundas, conseguiremos un efecto relleno (como los muelles de un colchón) y el refuerzo de la barrera cutánea protectora contra los agresores ambientales que agudizan los signos de la edad.

El siguiente paso también es obvio, la protección. El sol causa daños irreparables en la piel, degradando el colágeno y fomentando la aparición de manchas y arrugas, sobre todo en esta zona muy expuesta y delicada. No te olvides de cubrir el contorno con tu protector solar habitual u optar por un cosmético específico para los labios.

Continuamos con la exfoliación, física o química. Con ello retiramos las células muertas que se acumulan en la piel, conseguimos que los activos antiedad penetren mejor y más profundamente, alisamos la zona y fomentamos su tersura. Estos productos deben usarse tanto en los labios con en alrededor de ellos para suavizar las líneas verticales.

Ahora, llega el turno de los tratamientos. Cómo no, el protagonista y más poderoso antienvejecimiento debe ser el retinol. Este héroe del cuidado facial debe emplearse en una fórmula diseñada para el contorno de los labios, para garantizar los mejores resultados en estimular la síntesis y creación de colágeno, minimizando las arrugas, sin provocar irritación. Además, dichas formulaciones obtienen unos labios más sedosos, voluminosos y hacen que las manchas se desvanezcan. Claro que para un efecto instantáneo puedes emplear voluminizadores de labios o 'lip plumpers', como complemento.

De igual forma, los cosméticos labiales con péptidos o colágeno también ayudan a disminuir las líneas de expresión, estructurando y fortaleciendo los tejidos, tersando y redensificando el contorno, igualando la textura de la superficie.

Y, por último, pero no menos importantes, estimular la zona del contorno de los labios con masajes que reactivan la circulación para ayudar a la luminosidad, hidratación y producción de colágeno y elastina. Puedes hacerlo a diario con las manos, a golpecitos o pellizcando o usar un dispositivo manual o de microcorrientes.