Si hablamos del termino «cosmética emocional» probablemente no sepas del todo a qué nos referimos. Pero, ¿y si te dijéramos que los productos que incluyes en tu rutina de belleza pueden cambiar tu estado de ánimo? Sí, querida lectora. Eso es posible. Te hemos enseñado el perfume que da felicidad , pero esto va un paso más allá. Se trata de cuidar la piel a través de las emociones.
El principal factor del que depende del estado de la piel son las emociones. Y es que, no solo la edad afecta a cómo se comporta la dermis, la alimentación, el estilo de vida, el estrés... Existen muchos elementos que hacen que la piel tenga un aspecto u otro y que envejezca de forma diferente.
Y sí, el principal es lo que sentimos. Y es ahí desde donde trabajan en The Emotions Lab, la primera marca boutique española registro Cosmética Emocional que nace en 2016 con un claro objetivo: atender el cuidado emocional de tu piel.
La cosmética emocional es un concepto que se basa en la escucha del lenguaje de la piel para conseguir un triple efecto: proporcionar los nutrientes necesarios para compensar los signos de la edad, liberar los bloqueos emocionales que se somatizan originando una afección cutánea y restaurar la información celular de los tejidos para restablecer el equilibrio y la belleza de nuestra piel.
The Emotions Lab sigue filosofía con una base médica, estudios científicos contrastados y 100 años de historia que nace en torno a la naturaleza y su sabiduría para obtener sus beneficios en nuestra piel, armonizándola desde dentro hacia fuera.
Y llega de la mano de Gisella Gil, naturópata y fundadora de la marca, que ha creado un nuevo método patentado, único e innovador en el campo de la cosmética y del cuidado personal que va más allá de aportar a la piel solo activos para nutrirla, reafirmarla y/o hidratarla. Y lo ofrece a través de una fórmulas florales armonizar tu campo emocional cuidando de ti y de la naturaleza.
Y todo se consigue con la descodificación biológica, más conocida como Biological Decoding, que sostiene nuestras últimas investigaciones basadas en descifrar el lenguaje de la piel y más profundamente a trabajar la raíz del envejecimiento prematuro de la piel causado por estrés oxidativo.
Y uno de los productos top ventas de The Emotions Lab es la Mist Facial Revitalizing & Glowing (46 euros), una bruma de aroma a rocío de la mañana, hierba mojada y tierra que alisa el cutis, ejerce un efecto tensor, cierra los poros, revitaliza, ilumina y reaviva tu piel.
Y, ¿cómo? A través de las esencias florales del Dr.Bach, que aportan información vibracional de alta frecuencia infusionadas en hidrolatos y combinadas con aceites esenciales y plantas medicinales. Y como consecuencia, contribuye a mejorar el estado de ánimo.
Tiene una acción inmediata revitalizante, proporciona vitalidad, alegría, frescor y abre los sentidos. «Un ritual de tratamiento con flores expansivas, amarillas, vitaminas y minerales nos reconecta con la alegría de vivir, revitalizando y regenerando nuestra piel», dicen desde la marca.
Su uso es muy sencillo, hay que vaporizar en la cara y/o zonas corporales a tratar unas cinco veces al día, cada día. Se usa para tonificar la piel, para los días tristes y grises, para cuando te sientas cansada, en momentos de bajón, cuando quieras sentir tu piel fresca, puedes vaporizarte entre el pecho para abrir 4º chakra bloqueado, después de practicar deporte, en tu cabina de belleza, en el avión, jet lag, etc...
Y aunque es una práctica novedosa, ya hay opciones en el mercado que trabajan con la frecuencia vibracional que es la esencia de la cosmética emocional. Y si te ha gustado lo práctico que puede ser el formato bruma, también puedes probar con The Intuitive de la marca austriaca Max & Me.
Cada fina gota tiene el poder de cambiar tu forma de ser, disipando la ansiedad, el estrés y los pensamientos excesivos, al mismo tiempo que potencia los sentimientos de amor y bienestar. Además, tiene condiciones profundamente calmantes y poderes antiinflamatorios e hidratantes.
20 de enero-18 de febrero
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