Las pieles maduras requieren tratamientos intensivos que se diseñen específicamente para el deterioro común que suelen sufrir, debido a los procesos hormonales, el envejecimiento y cómo se ven afectadas por las agresiones ambientales, entre otros factores. Pérdida de densidad, flacidez, mucha sequedad, textura, manchas y una barrera cutánea comprometida suelen ser los problemas que surgen, por la descomposición o pérdida de los componentes naturales de la piel.
De tal forma, es necesario doblar la dosis de hidratación, ácidos grasos y lípidos que refuerzan la protección de la piel, así como activos antioxidantes que prevengan y palien el estrés oxidativo, más otros regeneradores que reparen los daños que sufre el cutis a esta edad, detengan el desgaste e impulsen los niveles de colágeno, elastina o ácido hialurónico, entre otros. De este modo, conservaremos la piel en buenas condiciones, minimizaremos los signos de edad que ya se han hecho visibles y evitaremos que aparezcan o empeoren y para ello, esta crema es de lo más eficaz.
Se trata de la Triple Lipid Restore 2:4:2 de SkinCeuticals, una crema antiedad para piel madura que repone la pérdida de lípidos, con el objetivo de reforzar la barrera protectora natural para que impulsar la actividad regenerativa y evitar el daño que provocan los radicales libres y otros factores que causan los signos visibles del envejecimiento.
La fórmula lo consigue a través de su alta concentración de estos lípidos, que se incorporan como un 2% de ceramidas puras, un 4% de colesterol natural y un 2% de ácidos grasos esenciales. Así, se restaura el equilibrio de la piel, se obtiene una dosis máxima de nutrición y se atenúan arrugas, falta de firmeza y de densidad, se corrigen textura y tono desigual y aspecto opaco.
Por otra parte, la piel también experimentará un aumento de la hidratación, que se mantiene en el interior por más de 24 horas, observando mayor tersura, luminosidad y volumen. Y, la adenosina impulsa el proceso de renovación celular, de igual forma que la producción de colágeno, para mejorar la elasticidad, alisar arrugas, tonificar y levantar la piel.
La dosis antioxidante se cubre con la vitamina E, que evita que los radicales libres ocasionen deterioro, favorece la hidratación y ayuda a reducir líneas de expresión y arrugas.
Mientras que, los aceites de lavanda, romero y menta tienen propiedades energizantes, potencian la microcirculación, hidratan, acondicionan y maximizan la luminosidad y la apariencia fresca, despierta y uniforme.
En solo 8 semanas, podremos ver una notable mejoría en la firmeza, las arrugas, el tono, el brillo, la suavidad y los poros. Además, es apta para todo tipo de piel, puede empleare tanto por la mañana como por la noche y su textura ligera la hace de rápida absorción.
Si buscas cremas a menor precio que también cumplen con objetivos similares como alternativas, te recomendamos la Crema de Día y Noche Fisioderm de Ziaja. Una fórmula rica e hidratante que repara la función de barrera alterada mediante los fosfolípidos. Esta crea una estructura de membrana que imita a la de la epidermis para reforzar la protección, reequilibrar la capa lipídica y reponer la deficiencia de los componentes fisiológicos de la piel, así como evita la pérdida de agua transepidérmica. De esta forma vemos un cutis más suave, terso y voluminoso, gracias a su mezcla de ceramidas, coco-glicéridos, triglicéridos, escualeno, aceite de macadamia, aceite de oliva, extracto de algodón y vitamina E.
Y, también la Good Cera Super Ceramide Cream de Holika Holika. Desarrollada para hidratar, redensificar, mejorar firmeza y elasticidad y reconfortar la piel, a través de una mezcla de ceramidas, betaglucano, glicoproteínas, manteca de karité y aloe vera, que forma una barrera lipídica para mantener la hidratación y fortalecer la protección natural. También incorpora ácido hialurónico, escualeno, aceite de coco y extracto de cacao para proporcionar la mayor hidratación y devolver la densidad a la piel. Además, la niacinamida y la vitamina E protegen, mejoran el aspecto de las arrugas, corrigen manchas, favorecen la hidratación y proporcionan luminosidad. Mientras que los aceites de lavanda, pomelo, geranio y naranja revitalizan la apariencia.