Desmaquillantes sólidos, la clave para realizar la doble limpieza en tu rutina de skincare

La doble limpieza es ya un paso indiscutible en nuestra rutina de belleza diaria. Esos desmaquillantes bifásicos, que aplicábamos con discos de algodón, o las temidas toallitas, que eran una de las peores alternativas, han quedado por fin relegadas a un segundo plano.

Ahora entran en juego los desmaquillantes sólidos, cuyos beneficios en la piel ya son más que evidentes y son la mejor baza para realizar la doble limpieza en nuestra rutina skincare. Es un paso que haremos siempre, vayamos maquilladas o no, ya que la propia grasa que produce la piel hace que se bloqueen los poros, teniendo como consecuencias pequeños brotes de acné.

Los desmaquillantes sólidos son básicamente todos aquellos que no lleven agua en su composición, pudiendo estar formulados con aceites, manteca de karité u otros ingredientes que sean capaces de arrastrar el maquillaje o la suciedad sin problema. Esto hace que sea mucho más eficaz que otros productos, teniendo en consecuencia unos mejores resultados.

A la hora de usarlo solo necesitas coger una pequeña cantidad y aplicarlo directamente por todo nuestro rostro, frotando suavemente con las manos. Con el propio calor de nuestros dedos y el producto, derretiremos todo el makeup, retirándolo posteriormente con agua.

La doble limpieza es una técnica que ya pusieron de moda las coreanas y que ahora se ha extendido, siendo la tendencia más seguida en el cuidado de la piel. Se trata de el primer paso, con las que inciamos nuestra rutina de skincare, y que consta de dos fases. Primero, empleamos un producto de textura oleosa, como sería el desmaquillante sólido, que elimina los residuos de forma suave.

En la segunda fase aplicamos nuestro limpiador facial , preferiblemente con textura acuosa, tipo gel o mousse, asegurándonos de eliminar todas las impurezas que pudiesen quedar en nuestra piel. Este paso es clave, ya que nos ayudará a regular el exceso de grasa que pudiese tener nuestro rostro, dejando como resultado una piel luminosa, fresca y ligera.

Si tú también quieres iniciarte en esta nueva forma de cuidado de la piel, hemos hecho una selección de nuestros desmaquillantes sólidos preferidos para que disfrutes de todos sus beneficios.

Este producto está especialmente formulado para proporcionar una limpieza en profundidad. Además de su eficaz acción desmaquillante, calma, repara e hidrata la piel, brindando un cuidado adicional. (6,99 euros).

Bálsamo limpiador hidratante que contiene una barrera lipídica, extracto de aceite de oliva y aceite de pepitas de uvas, ideal para eliminar las impurezas más profundas. (15,99 euros).

Formulado con un 99% de ingredientes de origen natural, este bálsamo desmaquillante fundente combina los poderes de un desmaquillante y un limpiador en una misma fórmula. (13,99 euros).

Este bálsamo desmaquillador de textura ligera elimina rápidamente incluso el maquillaje de rostro y ojos más rebelde: resistente al agua o de larga duración. Su textura compacta se transforma en un aceite fluido y satinado al aplicarlo. (24,99 euros).

Este bálsamo desmaquillante formulado con extractos naturales de manzanilla y manteca de Karité, aceite de oliva, aceite de almendras dulces y de coco, retira el maquillaje y limpia la cara dejando la piel suave y sedosa gracias a sus propiedades hidratantes y nutritivas. (6,49 euros).