Para evitar el envejecimiento cutáneo, la clave es una sola: proteger el rostro los 365 días del año, especialmente si residimos en zonas en las que la incidencia del sol es mucho mayor. Eso sí, el hábito de hacerlo a diario aún no lo tenemos nada interiorizado y seguimos asociando el protector solar a los meses de verano.

Especialmente porque las texturas blancas, pegajosas y pesadas no convencen. Por ello, cambiar el formato puede ser un gesto interesante. Como fichar una espuma con protección solar que se funde en la piel nada más aplicarlo.

Es el truco que recomienda la farmacéutica Yaiza Bouzas, autora de la cuenta de Instagram @gutbrainskin, experta en dermofarmacia, Nutrición clínica y Microbiota de la piel para combatir manchas y arrugas, pero sobre todo para prevenirlas.

¿La clave? Aplicar la suficiente cantidad de SPF en rostro, cuello, escote y manos, las tres zonas más expuestas con el cambio de temporada y de armario. «En textura crema, dos dedos colmados. En textura muy fluida: incluso tres dedos colmados. En textura espuma: el tamaño de una pelota de golf» sobre la mano con un solo toque sobre el difusor, explica la experta. Sin olvidar agitar muy bien el producto antes de utilizar.

Y es justo este tipo de solar el que ella utiliza todos los días en su rutina para combatir la hiperpigmentación producida tras el verano. «La textura es jugosa e hidratante, nada pegajosa», cuenta Bouzas sobre la espuma con protección solar Daily Defense Face SPF50 de EVY Technology, una mousse super ligera, antienvejecimiento y de amplio espectro que protege la piel del rostro contra los rayos UVA y UVB de forma eficaz, como cualquier otro protector.

Espuma con protección solar Daily Defense Face SPF50 de EVY Technology.

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Su fórmula es resistente al agua y su funcionalidad dura hasta 6 horas. Después hay que reaplicar. Además de filtros solares patentados, también contiene glicerina, ácido hialurónico, seda hidrolizada, colágeno, vitamina C y E, otros ácidos grasos que fortalecen la barrera natural de la piel, combaten los radicales libres y evitan el envejecimiento prematuro debido al daño solar y la contaminación.

Su textura hidrata muchísimo y su acabado es invisible, sin restos blancos ni sensación pegajosa. También protege frente a otros agentes irritantes como el aire acondicionado, el cloro y la sal o el maquillaje. Por lo que es una espuma ideal para utilizar todos los días del año.

Además, no contiene perfumes ni colorantes y está indicada para todo tipo de pieles, incluidas pieles sensibles, alérgicas, reactivas al sol o con melasma y vitíligo. Apto también para las pieles de los niños. Otra compra a la altura es el Airgel SPF 50 de Heliocare, que da frescura al rostro de forma instantánea mientras protege frente a los cuatro tipos de radiaciones (UVB, UVA, Visible e Infrarrojo).

«Su fórmula no comedogénica en espuma permite aplicar la fotoprotección de una manera sencilla. Es un gel texturizado en aire que aporta frescura a la piel y su formato con dosificador controla la cantidad de producto a aplicar. Cumple las más altas exigencias en materia de fotoprotección gracias a la tecnología Fernblock®+, filtros específicos y activos reparadores y antioxidantes», explican desde Cantabria Labs.