Son varios los tratamientos que se han puesto de moda para conseguir unas cejas perfectas y de aspecto natural que eleven la mirada. Pero es importante saber en qué consisten para poder elegir el más adecuado para ti (aunque si te equivocas, puedes probar con esta solución). Por eso hoy hemos recurrido a los profesionales para que nos cuenten cuáles son las características y qué diferencias hay entre el microblading, el microshading y el brow up.

Vídeo. Cómo depilarte las cejas correctamente

Empecemos por el microblading. Consiste en realizar unos microcortes a nivel de la epidermis para poder introducir un pigmento que cicatriza en la capa más superficial de la piel, pero sin ser un tatuaje. Por tanto, es un tratamiento capaz de rediseñar las cejas o rellenar aquellas zonas sin pelo, según afirman desde L'Atelier du Sourcil, un salón de belleza donde lo realizan.

Conisgue unas cejas perfectas gracias al microblading, el microshading o el brow up / L'Atelier du Sourcil

El microshading es un maquillaje semipermanente que se realiza con un lápiz fino que asigna pequeños puntos oscuros. Requiere incisiones, pero más pequeñas que en el microblading. The Beauty Concept y de L'Atelier du Sourcil coinciden en que te permitirá llevar una cejas arregladas, fuertes y densas. Por tanto, es ideal para aquellas que no están igualadas.

Los expertos de L'Atelier du Sourcil nos recuerdan que el brow up (o laminado) es el tratamiento menos invasivo, pues solo se trabaja a nivel del pelo existente de la ceja. Consiste en ordenarlas para crear un efecto óptico que las hace parecer más abundantes y gruesas. «Nos permite alisarlas cuando las tienes despeinadas», añaden en The Beauty Concept.

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