Hay perfumes de día, de noche, y después están los que te acompañan toda la vida. Está claro que la mayoría de personas tenemos un perfume favorito y un aroma que nos represente. Son esas fragancias que por mucho que te empeñes en cambiarla siempre aparecen de nuevo en tu vida.
¿Pero por qué siempre recurrimos al mismo perfume? A la mayoría nos hace sentir bien encontrar algo que sea personal, nuestro. Aunque todo el mundo pueda acceder a la fragancia, nos sentimos mejor cuando podemos decir alto y claro que un aroma nos represente y nos ha acompañado siempre. Casi podríamos decir que se convirtie, a veces, en casi un amuleto.
Entender el poder de los perfumes no es fácil y existen perfumistas dedicados especialmente a la investigación de los aromas. Como afirmaría el perfumista François Demanchy, «el perfume tiene un lenguaje que todo el mundo habla pero que no todo el mundo entiende».
Entre todos los perfumes siempre hay algunos que no fallan en los tocadores de amigas, madres, abuelas... Desde hace 10 años es uno de los perfumes que más olemos por la calle, tanto de día como de noche. ¿Las razones? Es fresco, enigmático y sensual.
Es el perfume mítico de Lâncome, La Vie Est Belle y que tanto habrás visto junto a su embajadora internacional Julia Roberts en campañas publicitarias. Todas hemos querido ser alguna vez Julia Roberts con esos vestidos de ensueño en mitad de París y con la Torre Eiffel a los lejos.
Pero dejando atrás sueños impensables, lo que sí es real, es que este perfume se ha convertido en uno de los más vendidos y que más terminamos usando. No solo nosotras, también algunas famosas. La última en caer ha sido Marta Hazas. La actriz española no se ha podido resistir al perfume de Lâncome.
¿Cuál es el secreto de este perfume? Lo primero, su frasco. Es una auténtica joya de tocador que todo el mundo desearía lucir en casa. Un formato que deja ver el líquido rosado del perfume, con tapón cuadrado y un pequeño lazo en gris.
El perfume La Vie Est Belle es uno de los más icónicos de la firma junto con el conocido Idôle. Este perfume cuenta con un bouquet de rosas encapsuladas y un aroma fresco y muy atrevido. Además, al igual que otros perfumes de Lâncome el envase es reciclable y se puede recargar cuando quieras en diferentes puntos de venta. En cuanto a su precio depende de su capacidad, pero van en torno a los 40 y 160 euros.