A estas alturas, ya sabemos que las técnicas de belleza de las coreanas son unas de las más completas. Y no hablamos sólo de su rutina de diez pasos o de la doble limpieza, que ya han extendido al resto del mundo, sino de otras quizá menos conocidas como la técnica toner wash method o la del doble sérum, que es de la que vamos a hablarte hoy. Hace ya mucho tiempo que nos dimos cuenta de la importancia de incluir un sérum en nuestra rutina de belleza, pero este paso a todas luces imprescindible, ha ido perdiendo peso en pro de otros productos más ligeros y de absorción más rápida, como las esencias u otros productos que abogan por simplificar las rutinas. Pero claro, esa tendencia al minimalismo puede hacer que estemos descuidando nuestra piel en exceso, por lo que las coreanas vuelven a reivindicar el uso del sérum.
Recordemos que el momento ideal para aplicarlos es justo después del tónico pero antes de la crema hidratante, porque el sérum es más pesado que el tónico pero más ligero que la crema. La técnica del doble sérum se basa en que las necesidades de nuestra piel no son siempre las mismas, por lo que un sólo sérum (y siempre el mismo) no tiene por qué cubrirlas en su totalidad. Por eso, este método te invita a escuchar las necesidades de tu piel en cada momento y combinar sérums que aporten los ingredientes que necesita.
Esta técnica puede aplicarse de dos formas distintas, respondiendo a dos necesidades diferentes:
1. Aplicar el mismo sérum dos veces: sería como realizar un tratamiento intensivo a diario. Tras aplicar una primera capa de tu sérum, esperas a que se absorba y te aplicas otra por encima. De este modo, capa sobre capa, los efectos del sérum se intensifican porque aplicas mayor cantidad de producto.
2. Combinar dos sérums diferentes: eso sí, tienes que tener cuidado de que sus ingredientes seran complementarios. La vitamina C no se lleva bien con los alfahidroxiácidos, el retinol y el retinol con el ácido glicólico pueden provocarte una reacción, por poner un ejemplo.
No tienes por qué hacerlo siempre, pero si las necesidades de tu piel cambian por el momento de tu ciclo hormonal, por ejemplo, o por el cambio de estación, no viene mal aportarle otro tipo de ingredientes además del que usas habitualmente. Como ves, esta técnica responde a necesidades reales, no a una moda pasajera, por lo que conviene tenerla en cuenta. ¿ Te apuntas a la técnica del doble sérum?