Las mujeres estamos luchando durante toda la vida con nuestros cambios hormonales y cómo repercuten en la tez. Una vez superado el periodo y los brotes de acné, llega la menopausia para resecar y reducir los niveles de los componentes capaces de regenerar la piel como el colágeno, la elastina y el ácido hialurónico. De hecho, con la menopausia podemos llegar a perder hasta un 30% más de este almacenamiento.
Con tales fluctuaciones y nuevas necesidades, se nos exige que nuestra rutina se enfoque a tratar cada uno de esos factores que envejecen nuestros cutis y le impiden mantener un estado saludable. La estimulación de la regeneración celular, la protección, la hidratación exhaustiva y un impulso a los lípidos, proteínas y colágeno son esenciales en el cuidado facial a partir de los 50. Pero, no hace falta que te vuelvas loca buscando que puedes usar en esta etapa porque aquí tienes un tratamiento específico que lo hace todo por tu piel madura.
Se trata de la línea White Pine Meno-Reverse de Korres, compuesta por cuatro cosméticos diseñados para tratar la piel menopáusica y posmenopáusica para garantizar la máxima eficacia y los cuales se complementan a la perfección para una cobertura total de las distintas condiciones del rostro a una edad madura. Las fórmulas se basan en el pino blanco, un activo capaz de estimular la producción de proteínas y elastina. Puedes probar con todos para que tu rutina sea óptima, pero nosotras te recomendamos dos.
En primer lugar, el White Pine Meno-Reverse Deep Wrinkle, Plumping + Age Spot Concentrate, un concentrado que mejora el aspecto de arrugas profundas, la flacidez y los problemas de hiperpigmentación. Su formulación natural combina el pino blanco con los péptidos derivados de la alcachofa para aportar volumen y flexibilidad, reafirmando, así como un concentrado que reduce poros, aclara manchas y protege del daño de los radicales libres, mediante el extracto de roble negro.
Mientras, la fibra de soja cumple la misma función que el retinol al favorecer el incremento del colágeno. La avena calma, fomenta la hidratación y acondiciona la tez. El ácido láctico ayuda a conseguir un tono y textura uniformes. Y el ácido hialurónico hidrata en profundidad y rellena.
Después está el White Pine Meno-Reverse Volumizing Serum-In-Moisturizer, con eficacia testado clínicamente en obtener un aspecto más firme en solo 7 días gracias a la tecnología Meno-Reverse™, con pino blanco y péptidos de alcachofa, redensificando el cutis, más el aceite de abisinia que combate la flacidez y tersa las arrugas, del mismo modo que deja la piel como el terciopelo e hidrata.
El ácido hialurónico, el escualano, el aceite de argán, el aceite de oliva, la avena y la manteca de karité proporcionan una dosis de hidratación intensa, al mismo tiempo que acondicionan y mejoran la luminosidad. La mezcla de ácidos láctico y salicílico exfolian suavemente la superficie para purificar, deshacerse del aspecto opaco, alisar la textura y unificar el tono. Y, la vitamina C y el aceite de albaricoque, protegen, tienen poder antiedad y hacen que el cutis esté más radiante que nunca.
Otros productos indicados para la piel madura en esta fase que también puedes implementar en tu rutina son la me-NO-pause Cooling Mist de Indeed Labs, una bruma formulada para hidratar y aliviar molestias de sensibilidad y picores, además de conseguir una apariencia buena cara despierta gracias al extracto de pepino refrescante y el complejo MG Relax® que mejora los signos de la edad y un tono uniforme con ácido hialurónico, loto y magnesio.
Y, la crema Neovadiol Compensating Complex de Vichy, diseñada para devolver la juventud a mujeres en estado de menopausia, gracias al Pro-Xylane, la glicerina y el ácido hialurónico que favorecen el volumen, la flexibilidad, la luminosidad y la firmeza, así como hidratan en profundidad y retienen la humedad.