La curiosa historia de cuando Pau Donés se convirtió en la inspiración (y el peluquero) de Alanis Morisette

Sucedió en la primavera de 2004. Alanis Morisette, una de las cantantes más populares del mundo, presentaba nuevo disco. So-Called Chaos era un trabajo vitalista y confesional, reflejo del buen momento personal que atravesaba. Se había recuperado del shock de convertirse en una superestrella global y su relación con el actor Ryan Reynolds iba viento en popa; incluso llegaron a anunciar una boda que finalmente no se produjo.

El primer single del disco fue Everything y en su vídeo Alanis avanzaba por una carretera, mirando a cámara. Con su característica melena, a los pocos segundos un espontáneo aparecía con unas tijeras y le cortaba su pelo largo. Para el resto del mundo era un personaje anónimo, pero en España no pasó inadvertido: se trataba de Pau Donés . ¿Cómo el líder de Jarabe de Palo había acabado siendo el improvisado peluquero de Alanis?

La historia es bien sencilla. Un directivo del sello de la artista –Maverick Records, a su vez la compañía propiedad de Madonna– le había enseñado el vídeo de Bonito, la canción que Jarabe de Palo había publicado un año antes. En él, Pau Donés caminaba también por una carretera mientras a su paso aparecían y desaparecían extras, sucediéndose diferentes interacciones. “Eso es exactamente lo que quiero para Everything”, dijo Alanis, que pidió que se pusieran en contacto con el realizador del clip: Marc Donés, el hermano de Pau.

Hay que hacer un pequeño inciso: Marc y Pau antes de que estallase el fenómeno Jarabe de Palo habían creado una empresa de atrezzo y figurinismo, y eran dos personas con una mucha sensibilidad y experiencia en el campo de la imagen. No es de extrañar que cada vídeoclip del grupo tuviera siempre tan buena acogida, porque para el cantante eran piezas que se concebían con un mimo que ha acompañado hasta el último tema de Jarabe de palo, 'Eso que tú me das'.

Una vez hecho el contacto, fue la propia Alanis la que insistió en que Marc dirigiera el vídeo de Everything y Pau hiciera un cameo. La canadiense quería dejar clara su inspiración. El cantante catalán acababa de ser padre de su única hija, Sara –la misma que baila con él en Eso que tú me das–, pero sacó un hueco para viajar hasta Los Ángeles. Allí fue cuando supo que sería el encargado del cambio de imagen de la artista y también quien, convertido en mensajero motorizado, le entregaría un mensaje que hoy con su desaparición a los 53 años queda amplificado. En el sobre que Alanis Morisette abría sólo había un mensaje que mostraba a cámara: “Gracias”.