Las 5 fotos con las que Amaia Montero demuestra todo lo que se quiere (y lo segura de sí misma que ahora está)

Hubo un día que no pudo más y estalló. Amaia Montero, harta de las críticas a su aspecto físico y de no ser valorada en la medida justa por su faceta musical, se marchó de las redes sociales de manera temporal. Lo hizo para curarse , como ella misma aseguró (y solo hizo un breve inciso para defenderse de unas acusaciones vertidas sobre ella por parte de una actriz argentina).

El regreso de la exvocalista de La oreja de Van Gogh fue triunfal. Espectacular. A nadie se le escapaba que estaba más delgada pero, sobre todo, que se sentía mucho más a gusto consigo misma . Que esos problemas que arrastraba y que le habían llevado a alejarse del ruido de los tuiteros e 'instagramers', habían desaparecido. Al menos, en apariencia.

Desde entonces, no ha parado de colgar imágenes con las que proyecta ese bienestar que buscaba. La última, sin ir más lejos, a comienzos de esta semana. Siguiendo el mismo patrón que con la mayoría de las intantáneas que ha ofrecido en los últimos tiempos: acento en el físico que se le está quedando y frase enigmática, poética si se quiere. "Hazle caso a tu Ave Fénix... arde y luego ponte en pie", se podía leer en esta ocasión.

Si alguien tiene dudas, tan solo tiene que irse a la publicación anterior. Con una imagen elegante, sentada en medio de una sobria sala y bajo una claraboya, hace cuatro días reflexionaba: "Desde que tengo uso de razón elegí claramente que antes que vivir de rodillas prefería morir de pie y así ha sido a lo largo de toda mi vida, aunque alguna vez me haya tenido que sentar para descansar".

Es cierto que, tras ese regreso, Amaia tuvo que cabrearse, porque hubo quien puso en tela de juicio que esa metamorfosis fuese por obra y gracia del sacrificio a la hora de ejercitarse o cuidar la alimentación. Fue tajante con un comunicado en el que desmentía haberse realizado operación o retoque alguno, y daba el primer aviso antes de poner en manos de sus abogados todo ese ruido que, de nuevo, se desmarcaba de su carrera musical.

Pero sigamos con esas fotos con las que Montero deja patente que algo ha cambiado en ella por dentro. Nos vamos un poco más atrás en su tablón. Hasta el 5 de julio. Y allí tropezamos con una imagen sobria, con un vestido negro, como bailando y tan solo indicando al lado que se encontraba feliz.

Pocas palabras también en esa foto del 2 de julio, de espaldas, con una parte inferior de su ropa interior mínima. Remarcando su trasero con orgullo. Porque ahora, a pesar de que quiera que se hable de música, lo cierto es que se muestra ante sus 'followers' de una manera diferente que denota seguridad en sí misma.

Para terminar, dentro de esos cinco ejemplos que hemos elegido para que nuestras lectoras comprueben que nuestro titular no miente, nos vamos hasta el 15 de junio. "Buenos días". Tan solo dos palabras al lado de una de esas imágenes que se convirtió en noticia por el cambio evidente de una Amaia, a la que nadie pone en duda, le ha sentado de maravilla en confinamiento. Se encuentra en ese pequeño grupo de privilegiados.