Puede que estemos ante la boda más extravagante y espectacular del año: una fantasía parcialmente inspirada en 'Barbarella', la película retrofuturista protagonizada por Jane Fonda en los años 60, y con John Galliano como ideólogo de los looks de la novia. Hablamos de Ivy Love Getty, la bisnieta del riquísimo magnate del petróleo J. Paul Getty, una leyenda en la pequeña gran historia de las grandes fortunas estadounidenses.
Ivy Getty (26 años), además de llevar uno de esos apellidos que abren todas las puertas, forma parte hoy del ejército de modelos 'socialites' de la agencia Ford, es íntima de la estrella de 'Gambito de dama' Anya Taylor-Joy y ha contado con Nancy Pelosi, portavoz de la Cämara de Representantes, como oficiante de la boda en el ayuntamiento de San Francisco. El gran dinero, Hollywood y el poder político, en perfecta sintonía. No te pierdas las fotos: están a otro nivel.
Dos días antes de la boda, Ivy Getty convocó a sus invitados a una fiesta temática inspirada en los años 60 y 'Barbarella'. La novia lució durante la noche tres vestidos inspirados en el 'Swinging London', un look vintage de Emanuel Ungaro, otro de Emilio Pucci y un tercero firmado por Norman Norell. Atención al grupo de invitadas: entre ellas está la primera dama de honor, Anya Taylor-Joy o la princesa Olympia de Grecia. El DJ de la noche fue Mark Ronson, el productor prodigio de genias como Amy Winehouse, y también actuó Earth Wind and Fire.
La portavoz demócrata del Congreso Nancy Pelosi ofició la ceremonia que unió a Ivy Getty y Tobias Alexander Engel, fotógrafo y aspirante a director de cine. Se conocieron gracias a un familiar y, luego, coincidieron en la Semana de la Moda de París, donde él estaba trabajando. Tras dos años de noviazgo, un anillo con 10 diamantes y un zafiro similar al de la princesa Diana confirmó el compromiso.
El día de la boda comenzó con una fiesta de pijamas que llevó, directamente, al momento de enfundarse en el espectacular look de John Galliano: un vestido de alta costura con aplicaciones de cristal cubierto por un velo (con guitarras bordadas en honor al padre de la novia, músico) y una gran corona, de inspiración medieval. El diseño creado para Ivy Getty incluía cuatro capas: un corsé, un vestido de tul cortado al biés, un segundo vestido de tul de color blanco con efecto filtro y, por último, el vestido-túnica con los fragmentos de cristal.
Tras la ceremonia, los novios y los invitados se trasladaron a la impresionante mansión Getty, convertida en un espacio de celebración con bares, barras y bailarines latinos ambientando el espacio. La increíble colección de arte y antigüedades de Anne y Gordon Getty, con tapices franceses, brocados chinos, candelabros rusos y pinturas venecianas completó la increíble escenografía. Ivy Love Getty lució un segundo vestido diseñado por John Galliano para la alta costura de Martin Margiela y una impactante gargantilla de aguamarinas. El diseño, confeccionado en tul y gasa rosa, flotaba a pesar de los bordados.